MP pide prisión preventiva y que el caso sea declarado complejo; cuatro enfrentarían extradición a EE.UU.
Santiago de los Caballeros. – La tercera fase de la Operación Discovery dejó un saldo de diez imputados y un expediente que el Ministerio Público pretende blindar desde el primer día. La tarde de este viernes, a las 4:30, un tribunal de Santiago conocerá la medida de coerción contra seis de los acusados de integrar una red que, durante años, se dedicó a estafar a personas de avanzada edad residentes en Estados Unidos.
La fiscalía no se anda con rodeos: 18 meses de prisión preventiva y la declaratoria de caso complejo. Argumentan que se trata de una estructura de criminalidad organizada, con decenas de víctimas y ramificaciones internacionales.
En la lista de procesados en Santiago figuran Jesús Manuel Castaños Colón, Adderly Antonio Polanco Báez, Bernardo Taveras Vélez, José Ramón López Tavarez, Juan Luis Naranjo Gómez y Luis Eduardo Méndez Ureña. La acusación los vincula con fraude informático, robo de datos personales, suplantación de identidad y lavado de dinero.
El expediente lo sustentan la Dirección General de Persecución del Ministerio Público, la Procuraduría Especializada Antilavado de Activos y la Fiscalía de Santiago. El procurador adjunto Wilson Camacho y la fiscal Ramona Nova encabezan la acusación, junto a un equipo de fiscales que asegura tener pruebas sólidas.
Pero la trama va más allá de Santiago. Otros cuatro dominicanos –Oscar Manuel Castaños García (alias Oscar Castaños, Oscar García o Castaño), Joel José Cruz Rodríguez (alias Paflow o Joel Cruz Hermano), Edward José Puello García y Gerardo Heriberto Núñez Núñez– están siendo procesados en la Suprema Corte de Justicia, reclamados en extradición por el gobierno estadounidense. Las autoridades de EE.UU. los acusan de asociación delictuosa para cometer fraude postal, fraude electrónico y lavado de activos.
El procurador adjunto Osvaldo Bonilla, al frente del proceso en la Suprema, confirmó que la audiencia para estos cuatro imputados también está fijada para esta tarde.
La investigación de Discovery 3.0 no nació de un día para otro. Llevaba más de dos años en marcha, según reveló el Ministerio Público. Las pesquisas destaparon un entramado que operaba a través de plataformas digitales y centros de llamadas, con un objetivo bien definido: captar datos personales de personas mayores en EE.UU., ganarse su confianza y vaciarles las cuentas.
El operativo de captura fue amplio y coordinado. Se ejecutaron 34 allanamientos simultáneos en Santiago, Puerto Plata y Santo Domingo, con la participación de 50 fiscales y 375 agentes de la Policía Nacional. La operación se llevó a cabo en conjunto con la División Especial de Investigación de Crimen Organizado Internacional (Deicroi) y con el apoyo del Buró Federal de Investigación (FBI). Al mismo tiempo, en Estados Unidos, el FBI allanaba residencias y oficinas en California, Nueva York, Florida, Maryland y Missouri.
Con esta acción, el Ministerio Público da continuidad a las operaciones Discovery y Discovery 2.0, todas contra el mismo tipo de fraude que, según las autoridades, ha dejado cientos de víctimas y millones de dólares en pérdidas.