Cuatro trenes de seis vagones aumentan la capacidad a 17 mil pasajeros por hora.
Distrito Nacional.- El Metro de Santo Domingo tiene desde este domingo con un pulso distinto. El presidente Luis Abinader encabezó la inauguración de dos obras de gran interés social: la ampliación de la Línea 1 para recibir trenes de seis vagones y la apertura del pasillo de interconexión peatonal en la estación Juan Pablo Duarte. La meta es clara: mover más gente, en menos tiempo y con mayor comodidad.
Desde hoy circulan cuatro trenes de seis vagones, lo que eleva la capacidad del sistema a 17 mil usuarios por hora. Para diciembre, según proyecciones oficiales, la cifra podría alcanzar los 22 mil. El cambio no es menor: el Metro transporta más de 380 mil personas al día y la saturación en horas pico era uno de sus problemas crónicos.
La obra más visible está en Santo Domingo Norte. Allí, cinco estaciones elevadas de la Línea 1 duplicaron la longitud de sus andenes, pasando de 60 a 120 metros, lo que permite la operación de trenes más largos. La incorporación de la nueva flota será progresiva y responderá a la demanda del servicio.
El segundo proyecto inaugurado es el nuevo pasillo de interconexión en la estación Juan Pablo Duarte, que conecta las líneas 1 y 2. Tres túneles —A, B y C— organizan el flujo de pasajeros y evitan los embotellamientos que antes complicaban el cambio de tren. La OPRET asegura que ahora el cruce será más rápido, seguro y cómodo.
Durante el acto, Abinader defendió la inversión como una apuesta al futuro del transporte público. “Incluye la adquisición y adaptación de 24 nuevos trenes, la repotenciación de todo el sistema eléctrico, la mejora de la señalización y las telecomunicaciones. Es un proyecto que transforma la experiencia de los usuarios”, dijo.
Rafael Santos Pérez, director ejecutivo de la OPRET, resaltó que las obras no son solo mejoras técnicas, sino cambios que tocan la vida diaria de la gente. “Más capacidad significa menos espera, más orden y mayor dignidad para todos”, afirmó.
La inversión total asciende a unos 260 millones de dólares, financiados con fondos del Estado y un crédito de la Agencia Francesa de Desarrollo (AFD). Según la OPRET, la modernización incluye trenes nuevos, sistemas eléctricos reforzados y señalización actualizada para garantizar un servicio más eficiente y seguro.
El presidente no dejó pasar la oportunidad de subrayar el impacto social de este tipo de proyectos. “Estamos resolviendo una necesidad crítica y lo hacemos con visión de futuro. Esta obra es para la gente”, señaló.
- En la ceremonia estuvieron presentes ministros, directores de instituciones, representantes diplomáticos, delegados de la AFD, técnicos de OPRET y usuarios habituales del sistema. Muchos aprovecharon para probar el nuevo pasillo y ver de cerca los trenes ampliados.
Para los pasajeros, el cambio será tangible en los próximos días: menos aglomeraciones, viajes más ágiles y tiempos de espera más cortos. La OPRET asegura que seguirá ajustando la frecuencia de trenes y la logística interna para que el aumento de capacidad se traduzca en un servicio más fluido.
Con esta inauguración, el Metro de Santo Domingo se acerca a estándares de operación de sistemas más grandes de la región. La diferencia, dicen las autoridades, estará en la atención al detalle y en priorizar al usuario como el centro de cada decisión.
En una ciudad donde el tráfico es un reto diario, el anuncio trae un respiro para quienes dependen del transporte colectivo. El reto ahora será mantener la eficiencia prometida y seguir ampliando la red para responder al crecimiento urbano que no se detiene.
