El Departamento de Estado recomienda hacer un testamento antes de viajar.
La alerta de viaje para Haití no podría ser más cruda. El Departamento de Estado de Estados Unidos ha emitido una advertencia dramática y poco común, aconsejando a sus ciudadanos que, si insisten en viajar a la nación caribeña, lo hagan con sus asuntos en orden como un testamento.
La recomendación es directa: "Escriba un testamento y designe los beneficiarios apropiados y/o un poder notarial, ponga en orden sus asuntos financieros".
La frase, que suena más a un preparativo de guerra que a un aviso de viaje, subraya la extrema peligrosidad que se vive en el país.
Desde hace meses, Washington mantiene el Nivel Cuatro de Alerta, el máximo posible, que aconseja directamente no viajar a Haití. La situación, según las autoridades estadounidenses, es "extremadamente peligrosa".
Lo cierto es que el caos y la violencia desatada por las pandillas han convertido la vida en algo precario. Por ello la advertencia de Estados Unidos no solo se centra en la violencia de las bandas, sino también en las devastadoras consecuencias que esta ha tenido en la infraestructura del país.
Uno de los mayores temores, y por eso la contundente recomendación, es la falta de acceso a la atención médica. Los hospitales y centros de salud han sido atacados, y la capacidad de respuesta es mínima.
El comunicado del Departamento de Estado es muy claro al respecto: una evacuación médica es casi imposible, los servicios de ambulancia son escasos y de mala calidad, especialmente fuera de la capital, y el costo de cualquier emergencia vital debe ser cubierto por el paciente de forma inmediata.
Para añadir más peso a la advertencia, se puntualiza que la embajada de EE. UU. en Puerto Príncipe no se hará cargo de los gastos médicos. "Los programas Medicare y Medicaid no cubren los gastos médicos en el extranjero", y los hospitales haitianos no aceptan seguros estadounidenses, exigiendo el pago completo antes de cualquier atención.
Además, el costo final es "mucho más alto que las estimaciones iniciales", y el paciente no es dado de alta hasta que se salde la deuda.
El mensaje es tajante: si estás en Haití, "planee salir del país lo antes posible de manera segura". La violencia de las pandillas es tan generalizada que incluso un convoy de vehículos blindados de la embajada fue atacado el 21 de octubre de 2024.
Los secuestros, una de las tácticas más usadas por los grupos armados, están a la orden del día, y ciudadanos norteamericanos han sido víctimas de ellos. La embajada también fue clara al decir que no puede ayudar a sus ciudadanos a ingresar a la República Dominicana por ninguna vía.
La alerta de Nivel Cuatro de EE. UU. rara vez se utiliza fuera de zonas de guerra activa, como Ucrania. Su aplicación a Haití es un indicio inequívoco de que la situación ha llegado a un punto de quiebre.
En un país donde Washington ha sido acusado históricamente de ser el responsable del caos actual, la cruda advertencia del Departamento de Estado es un recordatorio de que la vida en Haití se ha vuelto una apuesta con un precio demasiado alto. los detalles del diario digital Haití Libre, fueron recogidos por Prensa Latina.