El terremoto pone en alerta a Rusia, Japón, Alaska, Hawái y otras regiones del Pacífico
Moscú.- Un terremoto de magnitud 8,7 frente a las costas de Kamchatka, en el extremo oriental de Rusia, sacudió este martes la región y activó una cadena de alertas de tsunami en distintas zonas del Pacífico, desde Japón hasta Hawái. El fuerte movimiento telúrico se registró en la madrugada local y provocó una rápida respuesta de las autoridades en los territorios cercanos.
Inicialmente, las estimaciones de los sismólogos rusos hablaban de una magnitud de entre 7,7 y 7,9. Sin embargo, horas más tarde, el Centro de Alerta de Tsunamis de Estados Unidos elevó la cifra hasta 8,7. El epicentro se localizó cerca de la costa oriental de la península de Kamchatka, una zona geológicamente activa donde confluyen varias placas tectónicas.
El gobernador del Krai de Kamchatka, Vladímir Solodov, publicó un mensaje a través de Telegram en el que pidió calma a la población y solicitó evitar las zonas costeras. “Se ha declarado una amenaza de tsunami y se está evaluando la fuerza de las olas”, señaló. También informó que se ha iniciado una revisión de infraestructuras clave como escuelas, hospitales y guarderías para detectar posibles daños.
En la Bahía de Avacha, al sureste de Kamchatka, el Servicio Geofísico Unificado confirmó la activación de la alerta de tsunami. Allí, la fachada de una guardería resultó dañada, aunque afortunadamente no había niños dentro del edificio, ya que se encontraba en obras. Los trabajadores que estaban en el lugar lograron salir sin lesiones.
Más al sur, en la isla de Sévero-Kurilsk, parte del archipiélago de las Kuriles, también se sintió con fuerza el temblor. Valery Limarenko, gobernador de la región de Sajalín, informó de un sismo de magnitud 7,9 en esa zona y confirmó que se inició la evacuación de los residentes hacia zonas elevadas por precaución. “Según los datos preliminares, no hay víctimas ni daños significativos. La situación está bajo control y los equipos de emergencia operan con refuerzos”, aseguró. Poco después, confirmó que la primera ola había alcanzado la isla, pero que la población estaba a salvo.
El terremoto no solo activó alertas en territorio ruso. Japón también emitió advertencias por riesgo de tsunami, al igual que Estados Unidos, que alertó a los residentes de Hawái y varias zonas costeras de Alaska. Aunque por el momento no se han confirmado daños o víctimas fuera de Rusia, las autoridades mantienen la vigilancia activa ante cualquier cambio en el comportamiento del mar.
En Estados Unidos, los centros de monitoreo geológico continúan siguiendo la evolución del fenómeno. La costa oeste continental —desde California hasta Washington— permanece en estado de observación, aunque no se han emitido evacuaciones obligatorias. El sistema de alerta se mantiene activo y en contacto con las autoridades locales.
Kamchatka es una región acostumbrada a la actividad sísmica. La península forma parte del llamado Anillo de Fuego del Pacífico, una zona de gran actividad tectónica que cada año registra cientos de movimientos sísmicos de distintas intensidades. Sin embargo, un temblor de esta magnitud no es común y representa un riesgo real para las comunidades costeras, tanto por el impacto inicial como por el posible tsunami que pueda generarse después.
Las autoridades continúan trabajando para evaluar los efectos del sismo mientras mantienen activas las medidas de emergencia. Por ahora, la prioridad es garantizar la seguridad de los residentes y seguir de cerca el comportamiento del mar en las próximas horas.
