El cerrador de Cleveland es suspendido mientras MLB investiga vínculos
NUEVA YORK.–La sombra de las apuestas vuelve a ensuciar el béisbol profesional. Esta vez, el nombre que resuena en medio de la polémica es el del dominicano Emmanuel Clase, cerrador estrella de los Cleveland Guardians, quien ha sido apartado del equipo con una licencia paga no disciplinaria, mientras la Major League Baseball (MLB) investiga su posible vínculo con apuestas deportivas.
Clase, de 27 años y tres veces All-Star, no es el único lanzador de Cleveland en el ojo del huracán. Su compañero Luis Ortiz también fue suspendido por motivos similares, aunque no está claro si ambos casos están conectados. Ortiz permanecerá fuera hasta el 31 de agosto.
La organización de los Guardians se pronunció asegurando que, hasta el momento, no se espera que otros jugadores o miembros del equipo estén involucrados. Pero la situación ya ha dejado secuelas en el vestuario.
“No estoy contento. Esto es un desastre”, dijo sin rodeos el mánager Stephen Vogt, tras la derrota del lunes por la noche 8-6 ante los Rockies de Colorado. “Duele. Es lamentable. Ahora las apuestas deportivas son legales y, de pronto, estamos frente a una nueva realidad que puede afectar a cualquier equipo”, reconoció.
El caso de Clase llegó apenas un día antes del cierre de traspasos de la MLB. Su nombre sonaba como posible ficha de cambio, en una temporada donde lleva 24 salvamentos, 5 victorias y una efectividad de 3.23, la mejor de su carrera. Había sido un pilar en el bullpen, liderando la Liga Americana en salvamentos durante los últimos tres años.
La investigación forma parte del creciente esfuerzo de la MLB por vigilar las apuestas legales desde que en 2018 el fallo de la Corte Suprema de EE. UU. anuló una ley federal que prohibía este tipo de actividad en la mayoría de los estados. Desde entonces, los casos se han multiplicado.
En junio, cinco jugadores fueron sancionados, incluido Tucupita Marcano, quien recibió una suspensión de por vida tras realizar 387 apuestas por más de 150 mil dólares. El lanzador Michael Kelly y otros tres jugadores de ligas menores también fueron castigados con un año fuera del juego.
En el caso de Ortiz, se investiga un patrón sospechoso de apuestas en dos partidos específicos, uno en Seattle y otro ante San Luis, donde ciertos lanzamientos recibieron una actividad anormal. La alerta fue levantada por una empresa de integridad deportiva y notificada a la MLB.
De momento, la oficina del comisionado no ha dado más detalles sobre la investigación a Clase. La Asociación de Jugadores también ha preferido el silencio.
Mientras tanto, los Guardians siguen en caída libre. Ya suman 10 derrotas seguidas, y su récord de 52-54 empieza a alejar la esperanza de playoffs. Sin Clase, y con la tensión flotando en el ambiente, Vogt reconoció que, por ahora, optarán por un cierre por comité.
“Es parte del equipo”, lamentó el lanzador Cade Smith. “Y es una pena que no esté aquí”.