OMS, FAO y OMSA llaman a reforzar vigilancia pese a bajo riesgo general
El virus de la gripe aviar H5 sigue dando señales de actividad en distintas partes del mundo, aunque las principales agencias internacionales aseguran que, por ahora, el riesgo para la salud pública global se mantiene bajo.
Así lo establece un informe conjunto publicado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA). Según estas entidades, aunque los contagios entre animales siguen en aumento, la transmisión al ser humano es todavía limitada.
Ahora bien, para ciertos grupos el panorama cambia. Personas que están en contacto frecuente o directo con aves —como trabajadores agrícolas o criadores— enfrentan un riesgo de bajo a moderado, dependiendo de los protocolos sanitarios aplicados y de la situación local. En otras palabras: si hay brotes en el área y no se toman las medidas adecuadas, la posibilidad de contagio aumenta.
La transmisión entre animales no se detiene
Entre marzo y julio de 2025 se registraron 807 brotes nuevos del virus A(H5N1) en animales. La mayoría, 389, se dieron en aves silvestres, seguidos por 268 en aves de corral y 92 en mamíferos. Las infecciones se han reportado en todos los continentes salvo Oceanía, y los clados predominantes que circulan actualmente son el 2.3.2.1 y el 2.3.4.4.
En Camboya, nueve de los catorce brotes en aves de corral ocurrieron cerca de casos humanos reportados, lo que resalta la necesidad de una vigilancia más estricta en áreas rurales o con alta concentración avícola.
Casos humanos: pocos, pero mortales
En ese mismo periodo se detectaron 16 nuevos casos en humanos. Nueve fueron en Camboya, donde murieron cuatro personas. India y México también registraron muertes. La mayoría de los afectados tuvieron contacto directo o indirecto con aves domésticas. En el caso de México, se presume exposición indirecta a aves domésticas o silvestres, aunque en uno de los casos indios no se identificó la fuente de contagio.
No se han encontrado pruebas de transmisión de persona a persona, lo que alivia, de momento, el temor a una posible mutación del virus que lo vuelva más contagioso.
Llamado a la acción y recomendaciones
Las organizaciones internacionales insisten en que los países deben mantener y reforzar la vigilancia epidemiológica, sobre todo en comunidades con exposición frecuente a animales. Monitoreo activo, detección molecular y serológica, y uso de equipos de protección personal son esenciales para contener cualquier posibilidad de contagio.
También se recomienda hacer rastreo intensivo de contactos en torno a los casos humanos, y colaborar con los organismos locales para estudiar los riesgos potenciales del consumo de leche cruda o productos no pasteurizados.
El mensaje es claro: hoy el riesgo global es bajo, pero la amenaza persiste. La única forma de evitar sorpresas es seguir con la guardia en alto. Con datos de Europa Press