Fort Bliss albergará un nuevo campamento con capacidad para 5 mil migrantes
Nueva York.-En una decisión que confirma el rumbo endurecido de la política migratoria estadounidense, el gobierno federal destinará más de 1,200 millones de dólares para construir el centro de detención de migrantes más grande del país. El nuevo complejo, con capacidad para 5 mil personas, será levantado en la base militar de Fort Bliss, Texas, y solo albergará a hombres solteros.
Este anuncio llega pocas semanas después de la apertura de "Alligator Alcatraz", un controvertido centro de detención en los Everglades de Florida, apodado así por activistas debido a sus condiciones extremas.
Ambos proyectos forman parte del plan de la administración de Donald Trump para impulsar su ambiciosa agenda de deportaciones masivas.
La instalación en Fort Bliss no será una cárcel tradicional. Funcionará como una “instalación de muros blandos”, término que suele usarse para describir estructuras de lona, es decir, campamentos de carpas.
Las temperaturas extremas de Texas, especialmente durante el verano, han encendido las alertas de organizaciones humanitarias, que denuncian riesgos graves para la salud física y mental de los detenidos.
La fecha proyectada para la apertura del centro es septiembre de 2027. Para entonces, el gobierno espera tener listas las condiciones logísticas, de personal y seguridad que demanda una infraestructura de esta magnitud.
El sitio ocupará una parte del extenso territorio militar que Fort Bliss cubre entre Texas y Nuevo México.
Activistas y organizaciones defensoras de los derechos humanos ya han comenzado a movilizarse. Acusan al gobierno de replicar el modelo de Alligator Alcatraz, donde los migrantes son alojados en jaulas metálicas con literas, sin privacidad ni ventilación adecuada.
Señalan que este tipo de detenciones masivas normaliza el trato inhumano hacia quienes cruzan la frontera huyendo de la violencia o la pobreza extrema.
Todo esto ocurre en un contexto en el que el presidente Trump firmó recientemente una ley que autoriza 170 mil millones de dólares para reforzar la seguridad fronteriza, de los cuales 45 mil millones serán usados en detención migratoria.
Pese a que las cifras de cruces ilegales han descendido, la administración se prepara para incrementar la capacidad represiva del aparato migratorio.
El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) también verá un aumento sin precedentes en su presupuesto: pasará de recibir 8 mil millones de dólares al año a gestionar 76 mil 500 millones en un periodo de cinco años.