El reglamento 1-19 será revisado antes de ratificar o sustituir jueces
Santo Domingo.– El Consejo Nacional de la Magistratura (CNM) decidió este viernes revisar el reglamento 1-19, una pieza normativa clave que establece cómo se evalúa el desempeño de los jueces de la Suprema Corte de Justicia (SCJ). La revisión, según informaron sus miembros, busca garantizar que el proceso de evaluación se ajuste a los estándares de calidad y eficiencia requeridos para ese alto tribunal.
La decisión se tomó durante la primera sesión de trabajo del CNM en este nuevo ciclo, en el que se abordarán dos asuntos de peso: la evaluación de los magistrados actuales de la Suprema y la selección de nuevos jueces para el Tribunal Superior Electoral (TSE). La reunión tuvo lugar en el Palacio Nacional, presidida por el presidente Luis Abinader, quien encabeza este órgano.
El Consultor Jurídico del Poder Ejecutivo, Antoliano Peralta Romero, explicó que es común que el CNM realice ajustes normativos antes de iniciar cada convocatoria. En este caso, se trata únicamente de una revisión del reglamento 1-19, aunque si de esa revisión surgen propuestas de cambio, estas serán sometidas a consulta pública por 20 días. “El objetivo es recoger observaciones de la ciudadanía y de quienes estén interesados en el proceso”, señaló Peralta Romero.
Tras agotar esa etapa, el CNM definirá un cronograma de trabajo para decidir si ratifica o reemplaza a los actuales jueces. Este proceso es esencial para mantener la legitimidad y transparencia de la justicia dominicana.
Una revisión antes del examen
El reglamento 1-19 fue aprobado en 2019 y es el instrumento que define los criterios técnicos para evaluar el rendimiento de los magistrados. La evaluación periódica está contemplada en la Constitución y busca garantizar que quienes ocupan cargos en la SCJ mantengan un desempeño acorde con sus funciones.
En esta ocasión, los jueces que serán evaluados son Blas Rafael Fernández Gómez, Pilar Jiménez Ortiz, Manuel Alexis Read Ortiz y Moisés Ferrer Landrón. Todos llevan siete años en el cargo, tiempo establecido en el artículo 181 de la Constitución para que el CNM determine si deben continuar en sus puestos.
Además de estos cuatro casos, el CNM también deberá llenar una vacante generada por la salida del magistrado Napoleón Estévez Lavandier, quien ahora ocupa la presidencia del Tribunal Constitucional. La selección de su reemplazo —y de cualquier otra vacante que pueda surgir tras la evaluación— se hará bajo el marco de la misma Constitución, en su artículo 180.
Cambios también en el Tribunal Superior Electoral
El otro tema central de la convocatoria es el inicio del proceso para seleccionar nuevos jueces y suplentes del Tribunal Superior Electoral. El mandato actual de los miembros del TSE concluye en julio de 2025, y el CNM ya está preparando el terreno para lanzar una convocatoria pública. Esto se hace siguiendo lo establecido en el artículo 183 de la Carta Magna.
Todos los miembros del CNM estuvieron presentes en la reunión. Además del presidente Abinader, participaron Ricardo de los Santos, presidente del Senado; Alfredo Pacheco, presidente de la Cámara de Diputados; Luis Henry Molina, presidente de la Suprema Corte; y Napoleón Estévez Lavandier, presidente del Tribunal Constitucional. También asistieron el senador Omar Fernández, el diputado Tobías Crespo y la jueza Nancy Salcedo Fernández, quien se conectó de forma virtual.
¿Qué viene ahora?
El primer paso es la revisión del reglamento. Aunque no se especificó cuánto tomará ese proceso, sí quedó claro que cualquier cambio deberá pasar por consulta pública. Solo después de eso, el Consejo podrá trazar el cronograma oficial para evaluar a los jueces actuales, recibir postulaciones para las vacantes en la SCJ y el TSE, y eventualmente tomar decisiones.
En los próximos meses, el CNM tendrá que balancear el rigor técnico con la transparencia. La revisión del reglamento es una señal de que el Consejo quiere afinar el marco legal antes de ponerlo en práctica, y que no busca aplicar un mecanismo sin antes asegurarse de que funciona bien.
Aunque el proceso apenas comienza, las decisiones que se tomen en esta etapa marcarán el rumbo del Poder Judicial y del sistema electoral para los próximos años. El país estará observando.