Con récord de asistencia, concluyen sesión tras más de 13 horas de trabajo
La Cámara de Diputados cerró anoche una sesión maratónica con la lectura completa del nuevo Código Penal, un documento de 411 artículos que mantuvo a los legisladores en el hemiciclo desde las 10:00 de la mañana hasta las 11:17 de la noche.
Con 179 diputados presentes —el 94% de su matrícula— la jornada se convirtió en una de las más concurridas de los últimos años. Para agilizar el proceso, el presidente de la Cámara, Alfredo Pacheco, organizó turnos de lectura de 10 minutos por legislador. Uno tras otro, los diputados iban subiendo al podio a leer, mientras sus colegas aprovechaban para descansar brevemente.
- La dinámica, poco común pero efectiva, convirtió a los diputados en lectores y secretarios interinos, facilitando el avance del texto sin mayores interrupciones. Según el propio Pacheco, el ambiente se mantuvo en calma y con un tono de colaboración entre todas las bancadas.
“Me ha sorprendido gratamente esta participación. Culminamos con una matrícula récord de 179 diputados. Esto demuestra el consenso que existe sobre la necesidad de aprobar esta pieza fundamental para la República Dominicana”, dijo Pacheco al concluir la jornada.
Algunos legisladores entraban y salían por turnos, pero el compromiso colectivo con el proceso fue evidente. Desde todas las bancadas se ofrecieron voluntarios para participar en la lectura, lo que ayudó a mantener el ritmo y evitar que el cansancio pasara factura.
El Código Penal, una de las reformas más esperadas y debatidas del país, ha estado estancado durante años por diferencias políticas y temas sensibles. Aunque esta lectura no representa su aprobación final, sí marca un paso decisivo para avanzar en el debate formal y posterior votación.
Pacheco aprovechó el cierre para convocar a una nueva sesión a la 1:00 de la madrugada del jueves, con la intención de seguir despachando otros puntos legislativos pendientes.
Con esta jornada, la Cámara envía una señal clara de que el proceso avanza, y que —al menos por ahora— hay voluntad política para que el nuevo Código Penal empiece finalmente a tomar forma.