Espaillat y Gillibrand promueven fondos para infraestructura más resistente
Nueva York.-En un momento en que los fenómenos meteorológicos extremos son cada vez más frecuentes, el congresista Adriano Espaillat (NY-13) y la senadora Kirsten Gillibrand reintrodujeron la Ley de Tránsito Resiliente de 2025, una propuesta legislativa destinada a reforzar la capacidad de los sistemas de transporte público en Estados Unidos frente a desastres naturales.
La legislación propone asignar 300 millones de dólares adicionales del Fondo Fiduciario para Carreteras en el año fiscal 2026. Estos fondos serían canalizados a través del Programa de Subvenciones para el Estado de Buenas Condiciones, y podrían ser utilizados para proyectos exclusivos de mejora de resiliencia o como parte de obras mayores. La finalidad: anticipar, preparar y adaptar el sistema de transporte a desafíos como inundaciones, terremotos, olas de calor y el aumento del nivel del mar.

Medidas urgentes ante desastres naturales más frecuentes y devastadores
“La Ley de Tránsito Resiliente de 2025 establece la primera línea de financiación dedicada a fortalecer de forma proactiva nuestros sistemas de transporte, a la vez que trabajamos para hacerlos más resistentes ante las amenazas climáticas”, afirmó Espaillat.
El representante dominicano subrayó que la ley garantiza la continuidad operativa de la infraestructura ante futuras tormentas y sugiere una visión a largo plazo sobre cómo debe protegerse el sustento de las comunidades.
Gillibrand, por su parte, recordó que los sistemas de transporte ya enfrentan déficits presupuestarios, lo que complica aún más su adaptación a los nuevos retos climáticos. “Millones de estadounidenses dependen del transporte público. Esta ley es una inversión en su seguridad, confiabilidad y en el futuro del país”, indicó la senadora.
Precedentes legislativos refuerzan compromiso de largo plazo con el transporte
Esta no es la primera vez que se impulsa esta propuesta. Espaillat y Gillibrand introdujeron versiones anteriores del proyecto en 2022 y 2023.
Además, en 2021, Gillibrand logró incluir secciones clave de su Ley de Carreteras Resilientes dentro de la Ley de Infraestructura Bipartidista, como disposiciones para elevar carreteras, reubicarlas fuera de zonas de riesgo y construir barreras protectoras contra inundaciones.
Con la reintroducción de esta ley, los legisladores refuerzan su llamado a que Estados Unidos invierta de forma decidida en un transporte público que no solo sea eficiente, sino también resiliente, seguro y sostenible.