Solo el 30% de las investigaciones superan el impacto promedio mundial
Santo Domingo.- La ciencia dominicana pisa fuerte en producción, pero su impacto global sigue quedando corto. Esa fue la conclusión central del análisis presentado por la doctora Giovanna Rioggi Olivares en el XX Congreso Internacional de Investigación Científica (CIC 2025), organizado por el Ministerio de Educación Superior, Ciencia y Tecnología (MESCyT).
El país ha logrado avances claros. En la última década, las publicaciones científicas dominicanas han acumulado más de 36 mil citas y el 82% de los trabajos han sido citados al menos una vez. Las universidades PUCMM, UASD, INTEC, UNFU y UNIBE, junto a centros especializados como ISFODOSU y la UFHEC, destacan por su presencia constante en revistas indexadas.
Sin embargo, el crecimiento en volumen no se traduce automáticamente en mayor impacto. “Cuando medimos el impacto normalizado por campo, el panorama cambia. Solo el 30% de las investigaciones superan el promedio mundial en sus respectivas áreas”, explicó Rioggi. De hecho, el 52% está por debajo del estándar global y la mediana del impacto relativo es de 0,72, lo que deja a la ciencia nacional un 28% por debajo de la media internacional.
Aun así, hay instituciones que sobresalen. Mientras PUCMM, UASD e INTEC lideran en cantidad de publicaciones citadas, entidades como Profamilia, el Centro Gamma Knife y UCATECI muestran mejores promedios de impacto por documento. “Eso indica que no se trata solo de publicar más, sino de cómo y dónde se publica”, agregó la experta.
Otro punto clave abordado en el congreso fue la relación entre la ciencia producida en el país y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Apenas el 49% de las publicaciones dominicanas en Scopus están vinculadas a algún ODS. De esas, el ODS 17 (Alianzas) y el ODS 3 (Salud y bienestar) son los más representados. El segundo concentra el 29% de los estudios relacionados con sostenibilidad.
“La conexión con los ODS aún es débil y concentrada en pocas áreas. Eso limita el potencial transformador de la ciencia dominicana”, sostuvo Rioggi. Otros objetivos como Igualdad de género (ODS 5), Ecosistemas terrestres (ODS 15) y Energía asequible (ODS 7) aparecen en menor medida, y muchos apenas figuran.
En cuanto a proyectos financiados, el panorama mejora. El 87% de las investigaciones con fondos tienen alguna relación con los ODS. La UASD lidera en volumen, con investigaciones que abordan desde salud hasta infraestructura y seguridad alimentaria. “El desafío ahora es alinear mejor los recursos con las prioridades nacionales e internacionales”, apuntó Rioggi.
La participación de decenas de expertos nacionales e internacionales en el CIC 2025 dejó claro que la ciencia en República Dominicana está en marcha, pero aún tiene camino por recorrer. Más allá de producir, el reto es incidir, aportar soluciones concretas y posicionarse con fuerza en la conversación científica global.