La cifra oficial supera el balance anterior reportado por el Ministerio de Sanidad gazatí
Santo Domingo, R.D. – La Oficina de Derechos Humanos de la ONU confirmó que al menos 798 personas han muerto en la Franja de Gaza mientras intentaban acceder a ayuda humanitaria distribuida por centros instalados por Israel y gestionados por la Fundación Humanitaria de Gaza (GHF), una entidad de perfil israelí-estadounidense.
La cifra oficial supera el balance anterior reportado por el Ministerio de Sanidad gazatí y evidencia una escalada dramática del sufrimiento civil en medio del conflicto armado.
El periodo analizado abarca desde el 27 de mayo hasta el 7 de julio, y de las víctimas registradas, 615 fallecieron en las inmediaciones de los puntos de entrega de GHF y otras 183 en las rutas de los convoyes, según detalló Ravina Shamdasani, portavoz del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
Ataques con balas dejan saldo sangriento en centros de ayuda
De acuerdo con la ONU, la mayoría de estas muertes fueron provocadas por heridas de bala, lo que ha levantado una alarma global sobre la falta de protección para civiles que buscan comida y asistencia básica.
“Estamos ante una situación donde las personas deben elegir entre ser tiroteadas o morir de hambre”, expresó Shamdasani, calificando los hechos como “crímenes atroces”.
Uno de los episodios más estremecedores ocurrió frente a una clínica gestionada por la ONG Proyecto Esperanza, aliada de UNICEF, donde al menos 15 personas, incluyendo mujeres y niños, fueron asesinadas.
Aunque Israel reconoció el ataque, alegó que el blanco era un miembro de Hamás implicado en los hechos del 7 de octubre de 2023.
Organismos piden garantías y denuncian situación insostenible
Desde la Organización Mundial de la Salud (OMS), su portavoz Christian Lindmeier declaró que se están “quedando sin palabras” para describir la catástrofe humanitaria.
Denunció que “mujeres y niños son asesinados mientras recogen alimentos en refugios o clínicas supuestamente seguras”, y pidió garantías regulares para la entrada de combustible, vital para mantener operativas las instalaciones de salud, las plantas desalinizadoras y panaderías en Gaza.
En respuesta a la creciente presión internacional, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) reconocieron que han implementado medidas adicionales como vallas, señalización y rutas nuevas cerca de los centros de distribución, tras lo que describen como “lecciones aprendidas”.
Desde el inicio de la ofensiva militar israelí en Gaza, el 7 de octubre de 2023, el balance es devastador: más de 57,700 personas han muerto y unas 137,600 han resultado heridas, según datos de las autoridades palestinas.
Estos hechos son consecuencia directa del ataque de milicianos de Hamás que dejó 1,200 muertos en Israel, desatando una ofensiva militar sin precedentes que ha arrasado buena parte del enclave palestino y ha puesto en entredicho el respeto al Derecho Internacional Humanitario.
La comunidad internacional mantiene su preocupación por el deterioro imparable de la situación humanitaria en Gaza, donde la muerte se ha vuelto una consecuencia directa del hambre y la desesperación. Con datos de Europa Press.