Conecta desde Montecristi hasta Santiago los principales proyectos de generación a gas natural del país
Con la inauguración de la Línea de Transmisión Pepillo Salcedo – Guayubín – El Naranjo, la República Dominicana marca un antes y un después en el desarrollo energético del país: una línea de transmisión de 345 kV, con 130 km de recorrido, conecta desde Montecristi hasta Santiago los principales proyectos de generación a gas natural del país
Así lo consideraron los auspiciadores de la obra ya que la infraestructura eléctrica consolida a Manzanillo como eje energético del Caribe.
La nueva infraestructura, considerada la más importante jamás construida en la región Norte, se convierte en pieza clave para la interconexión de los proyectos de generación eléctrica a gas natural en Montecristi con el Sistema Eléctrico Nacional Interconectado (SENI).
El acto de inauguración, encabezado por el presidente Luis Abinader, tuvo lugar este martes 9 de julio en la provincia de Montecristi. El mandatario calificó la obra como "una infraestructura transformadora para garantizar un sistema energético moderno y estable para todos los dominicanos".
Una red eléctrica con visión moderna y estándares internacionales
La obra, desarrollada por Energía 2000 en colaboración con la Empresa de Transmisión Eléctrica Dominicana (ETED) y ejecutada por la firma Elecnor, abarca 130 kilómetros de longitud, con 321 torres espaciadas a intervalos de 400 metros y una configuración en doble terna de 345 kV.
Esta línea conecta los proyectos de generación eléctrica en Montecristi —entre ellos la central Manzanillo Power Land de 414 MW— con la subestación El Naranjo, en Santiago.
La inversión total fue de 156 millones de dólares, y su ejecución, en un plazo menor a dos años, ha sido destacada como un ejemplo de eficiencia en la sinergia público-privada.
“Esta línea ha sido concebida con los más altos estándares técnicos internacionales. Su impacto se traducirá en una energía más confiable, competitiva y accesible para industrias, comercios y comunidades”, afirmó Jaime Santana Bonetti, presidente de Energía 2000.
Infraestructura energética potencia desarrollo y atrae nuevas inversiones
Durante el acto también fue inaugurada la subestación eléctrica de Manzanillo Power Land, diseñada para una capacidad nominal de 414 MW y equipada con tecnología de punta en protección, control y transformación.
Esta subestación facilitará la integración al SENI de más de 1,200 MW de generación a gas natural en desarrollo, reforzando la visión del Gobierno de transformar a Manzanillo en el nodo energético principal del Caribe insular.
El proyecto representa un modelo de infraestructura transformadora que, además de fortalecer la seguridad energética nacional, promueve el desarrollo regional, la atracción de nuevas inversiones y la confianza del sector privado en las alianzas estratégicas con el Estado.
Este hito forma parte del Plan Nacional de Expansión del SENI y refleja el compromiso del Gobierno dominicano con la construcción de un sistema eléctrico más robusto, sostenible y equitativo, alineado con los objetivos de crecimiento económico y bienestar social.