Sostiene que esas prácticas limitan gravemente el desarrollo integral de niñas y adolescentes en el país.
SANTO DOMINGO. – El Consejo Nacional para la Niñez y la Adolescencia (CONANI) exhortó este viernes a toda la sociedad dominicana a transformar los patrones culturales que aún normalizan las uniones tempranas y los embarazos en adolescentes, prácticas que limitan gravemente el desarrollo integral de niñas y adolescentes en el país.
La presidenta ejecutiva de CONANI, Ligia Pérez Peña, advirtió que, aunque la República Dominicana ha logrado avances significativos en la reducción de estas problemáticas, es indispensable romper con el ciclo de creencias, costumbres y actitudes que en muchos contextos siguen justificando y perpetuando estas situaciones.
“No podemos seguir viendo como algo normal que una niña o adolescente interrumpa su desarrollo, abandone la escuela y asuma roles de adulta antes de tiempo. Las uniones tempranas son una forma de violencia, y como sociedad debemos erradicarlas desde la raíz cultural que las sostiene”, enfatizó Pérez Peña.
La funcionaria recordó que las relaciones sexuales entre adultos y menores constituyen abuso sexual, tipificado como delito en la Ley 136-03, que establece que toda práctica sexual entre un adulto, o alguien cinco años mayor, y un niño, niña o adolescente es punible.
También reiteró que ofrecer o aceptar dinero, remuneraciones o cualquier retribución a cambio de relaciones sexuales con menores de edad es un crimen, así como la entrega de niños o adolescentes para explotación sexual, prostitución, comercialización u otras prácticas que los denigren.
“Es fundamental insistir en que las personas menores de edad no pueden consentir relaciones sexuales, porque carecen de capacidad legal”, subrayó la presidenta ejecutiva.
De acuerdo con los últimos datos de la Encuesta Nacional de Hogares (ENHOGAR 2024), el 24.9 % de las mujeres de entre 20 y 24 años se unieron antes de los 18 años, y el 4.8 % antes de los 15 años.
En comparación con 2019, estas cifras disminuyeron en 6.6 y 4.6 puntos porcentuales respectivamente, evidenciando el impacto positivo de los esfuerzos encabezados por el Gabinete de Niñez y Adolescencia (GANA), que preside la primera dama Raquel Arbaje y coordina CONANI.
Desde la promulgación de la Ley 1-21, que prohíbe el matrimonio infantil en el país, se han fortalecido políticas públicas que muestran resultados alentadores: durante el primer trimestre del 2025, los embarazos en adolescentes registraron una reducción histórica con 4,286 casos en niñas y adolescentes de 10 a 19 años, según el más reciente reporte de la Oficina Nacional de Estadística (ONE).
La implementación de la Política de Prevención y Atención a las Uniones Tempranas y el Embarazo en Adolescentes (PPA) ha sido clave en este progreso.
Este programa ofrece formación en educación sexual integral, habilidades para la vida, formación vocacional y empoderamiento para jóvenes de diversos entornos, además de iniciativas de crianza positiva para padres, madres, tutores y líderes comunitarios, con el objetivo de erradicar las causas estructurales de las uniones tempranas y los embarazos en adolescentes.
