Una dermatóloga revela cómo lograr huevos perfectos sin teflón ni químicos
MADRID.- Freír un huevo sin que se pegue y, además, sin exponerse a químicos dañinos parece una proeza doméstica reservada a cocineros expertos o a utensilios carísimos. Pero una dermatóloga ha demostrado en TikTok que no hace falta ni lo uno ni lo otro. Solo se necesitan los pasos correctos, una sartén de acero inoxidable y algo de atención al fuego.
La técnica se volvió viral gracias a la creadora de contenido y dermatóloga @drsarasimonsen, quien compartió el método en un video que ya suma miles de visualizaciones. Lo interesante no es solo que funciona, sino que evita el uso de sartenes antiadherentes que, al deteriorarse, pueden liberar sustancias químicas relacionadas con problemas hormonales.
Todo está en el calor
La clave, asegura Simonsen, está en controlar la temperatura de la sartén. El proceso comienza calentando la sartén vacía a fuego medio-alto (nivel 7 en cocinas eléctricas). No se añade aceite ni agua en esta etapa. Pasado un minuto, se hace la llamada “prueba del agua”: se echan unas gotas de agua y, si se agrupan en bolitas que bailan sobre la superficie, es señal de que el metal alcanzó la temperatura justa.
Con la sartén en su punto, se baja el fuego a nivel medio (nivel 4), se espera que el agua se evapore por completo y entonces sí, se añade el aceite. Se debe distribuir por toda la superficie inclinando suavemente la sartén. Si se forman ondas en el aceite, como si vibrara, ya está lista para recibir el huevo.
Huevo a temperatura ambiente, sin moverlo al principio
Otro detalle clave: el huevo no debe estar recién sacado de la nevera. “Usar huevos a temperatura ambiente evita cambios bruscos de temperatura que pueden afectar la cocción”, explica la dermatóloga. Se rompe el huevo con cuidado directamente sobre la sartén caliente y, en lugar de moverlo enseguida, se deja reposar unos segundos. Esto permite que la base se selle bien y no se adhiera al acero.
Pasado ese tiempo inicial, el huevo se cocina de forma uniforme, sin necesidad de manipularlo demasiado.
Sin recubrimientos, sin químicos, sin complicaciones
Lo más relevante del método, más allá del resultado visual, es que evita la exposición a materiales que pueden liberar sustancias tóxicas, como el teflón o el PFOA. Estos químicos, conocidos como disruptores endocrinos, están bajo la lupa por sus posibles efectos en la salud hormonal y reproductiva.
Simonsen asegura que con el uso de acero inoxidable se reduce ese riesgo. Además, estas sartenes no se rayan fácilmente, lo que permite usar espátulas de acero en lugar de las clásicas de silicona o plástico, que también pueden liberar compuestos sintéticos al deteriorarse.
Un resultado profesional en casa
El resultado, según quienes han probado la técnica, es un huevo con bordes crujientes, yema intacta y sin restos pegados en la sartén. Nada mal para una receta que no requiere trucos de chef ni utensilios costosos. Solo calor bien gestionado y materiales seguros.
Este sencillo truco, que une salud, sostenibilidad y sabor, ha conquistado tanto a amantes de la cocina como a quienes solo quieren desayunar bien sin complicarse. Porque al final, lo simple –cuando se hace bien– también puede ser lo mejor.