La Asamblea General de la OEA busca soluciones a la violencia en la nación caribeña
La Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) ha refrendado su compromiso con la estabilidad de Haití. Este viernes, aprobó una resolución que busca soluciones a la creciente crisis de violencia provocada por bandas armadas y reafirmó su apoyo a la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad (MSS) en el país, liderada por Kenia y respaldada por Naciones Unidas, la cual cumple ya un año en operación.
En el texto aprobado durante su 55ª Asamblea General, la OEA insta a sus estados miembros a proporcionar ayuda "según (sus) capacidades" a la MSS en Haití a través del Fondo Fiduciario de la ONU.
Además, subraya la necesidad de fortalecer al Estado haitiano y sus Fuerzas Armadas mediante "contribuciones materiales y en especie".
El organismo internacional también apremia a los países de la OEA a intensificar "con urgencia sus esfuerzos para la aplicación de soluciones concretas y efectivas a la grave crisis de seguridad, política y humanitaria de Haití".
La profunda crisis de seguridad y sus impactos en la nación
Los Estados miembros analizaron la crisis que atraviesa Haití, marcada por una violencia "generalizada" y un debilitamiento de las instituciones gubernamentales que requieren un fortalecimiento urgente. A esta compleja situación se suma el significativo impacto del tráfico de armas y drogas en la nación caribeña.
Desde hace años, Haití padece un clima de violencia debido a la creciente presencia de bandas armadas en las calles, que entre enero y mayo de este año han provocado la muerte de más de 2.600 personas.
Además, se ha registrado un repunte de la violencia sexual y del reclutamiento de menores por parte de los grupos armados, según informes de la oficina de Derechos Humanos de la ONU.
Balance de la misión de seguridad y planes a futuro
Por su parte, el comandante de la misión internacional, el keniano Godfrey Otunge, ofreció un balance del primer año de la MSS en Haití. Destacó el "progreso tangible" logrado por el mecanismo, aunque reconoció desafíos como la falta de financiación y la complejidad logística de implementar un "enfoque tan pionero".
Finalmente, Otunge anunció que se desplegarán más bases de operaciones en la capital, Puerto Príncipe. Estas servirán como "centros estratégicos para la recopilación de inteligencia" y, con una advertencia clara, comunicó a las pandillas callejeras que su "rutina" ha llegado a su fin. Con datos de Europa Press