División demócrata debilita causa de destitución por ataque a irán
NUEVA YORK.-En una votación aplastante de 344 votos contra 79, la Cámara de Representantes de Estados Unidos desestimó este martes una resolución impulsada por el congresista demócrata Al Green, que buscaba abrir un juicio político contra el presidente Donald Trump por ordenar ataques a instalaciones nucleares en Irán sin la aprobación del Congreso.
Pese al control republicano de la Cámara, el intento fue sofocado principalmente por la falta de respaldo dentro del propio Partido Demócrata. 128 demócratas, incluidos los líderes parlamentarios Hakeem Jeffries, Katherine Clark y Pete Aguilar, se unieron a los republicanos para archivar la iniciativa, reflejando un marcado deseo de evitar un choque institucional mayor en plena campaña electoral.
La resolución acusaba a Trump de abuso de poder por “usurpar la autoridad constitucional del Congreso para declarar la guerra”, al ordenar los ataques a las plantas nucleares de Natanz, Fordo e Isfahán el pasado 21 de junio. El texto sostenía que el presidente “violó su juramento constitucional” al actuar de forma unilateral.
La guerra con Irán provoca grietas en ambos partidos
Una de las pocas voces disidentes dentro del Partido Demócrata fue la de Alexandria Ocasio-Cortez, quien votó en contra del archivo de la resolución. La congresista de Nueva York sostuvo que la acción militar sí constituye motivo suficiente para un juicio político y criticó a sus colegas por no hacer valer la autoridad del legislativo.
Desde el bando republicano, el representante de Kentucky Thomas Massie también cuestionó la legalidad de los ataques. En un gesto inusual de colaboración bipartidista, trabaja junto al demócrata Ro Khanna en una propuesta para reforzar los poderes de guerra del Congreso, con el objetivo de evitar nuevas intervenciones militares sin aprobación legislativa.
A pesar de las críticas, la Casa Blanca celebró la votación como un respaldo a la política de Trump en Medio Oriente. El subsecretario de prensa Taylor Rogers declaró a The Hill que el mandatario “logró lo que ningún otro presidente ha conseguido: destruir el programa nuclear iraní y negociar un alto el fuego en cuestión de días”.
Informe del Pentágono contradice versión oficial de trump
No obstante, un informe preliminar de la Agencia de Inteligencia de Defensa (DIA) desmintió directamente la narrativa de victoria de la Casa Blanca. Según el documento, los ataques no destruyeron los componentes críticos del programa nuclear iraní, sino que lo retrasaron apenas unos meses.
Esto pone en entredicho la afirmación repetida por Trump de que las instalaciones fueron “completamente destruidas”. El reporte del Pentágono subraya que Irán aún conserva la capacidad técnica y científica para reconstruir sus sistemas de enriquecimiento de uranio, lo que arroja dudas sobre la eficacia estratégica del ataque.
El congresista Al Green, por su parte, aseguró que continuará insistiendo en mecanismos de rendición de cuentas. “El pueblo estadounidense merece un presidente que respete la Constitución, no que la pisotee en nombre del poder militar”, declaró tras la votación.
El resultado de este episodio revela no solo las tensiones entre poderes, sino también la dificultad del Partido Demócrata para alinear una estrategia coherente frente a un presidente que continúa tomando decisiones unilaterales con consecuencias globales.
