Republicanos destacan su papel en frenar amenaza nuclear
El congresista republicano Buddy Carter presentó formalmente la candidatura del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, al Premio Nobel de la Paz, en reconocimiento a su papel en el acuerdo de alto el fuego entre Israel e Irán, pacto que ha sido celebrado por sectores conservadores pese a la controversia internacional por los bombardeos ordenados contra instalaciones nucleares iraníes.
La nominación, enviada al Comité Noruego del Nobel, describe como “histórico y extraordinario” el liderazgo de Trump en la resolución del conflicto, y lo ensalza por impedir que Irán —definido como “el mayor Estado patrocinador del terrorismo del mundo”— alcanzara capacidades nucleares operativas.
La influencia de Trump fue clave en el acuerdo
En su carta, Buddy Carter subraya que “la influencia del presidente Trump fue decisiva para forjar un acuerdo rápido que muchos creían imposible”, destacando su capacidad para ejercer presión y lograr un alto el fuego tras diez días de escalada militar.
En palabras del legislador, el expresidente ofreció al mundo “un rayo de esperanza poco común” en una región tradicionalmente marcada por “animosidad histórica y volatilidad política”.
Trump, fiel a su estilo, reaccionó con entusiasmo en su red Truth Social, donde compartió la propuesta y expresó sentirse “honrado” de haber ordenado los ataques que destruyeron las instalaciones nucleares iraníes de Isfahán, Natanz y Fordo. “Ha sido un gran honor para mí”, escribió.
Críticas no detienen la exaltación republicana
No es la primera vez que sectores republicanos impulsan la candidatura de Donald Trump al Nobel. En enero de este año, el representante por California, Darrell Issa, también lo propuso, destacando lo que llamó su “impacto asombrosamente efectivo en la paz mundial”.
Sin embargo, la propuesta ha despertado nuevas críticas en el ámbito diplomático, académico y mediático, donde se cuestiona si la destrucción de instalaciones estratégicas y la muerte de personal en operaciones militares pueden considerarse acciones merecedoras de un premio diseñado para reconocer a quienes promueven la paz, la diplomacia y la resolución pacífica de conflictos.
Mientras tanto, Trump y sus aliados celebran lo que consideran una victoria política y estratégica de alcance global, mientras Irán niega haber violado el alto el fuego tras el acuerdo mediado por Estados Unidos, y advierte que responderá si se repiten ataques contra su soberanía.Con datos de Europa Press.