Trump confirma ataques a Fordo, Natanz e Isfahán desde Truth Social
Madrid / 22 de junio. – La tensión en Medio Oriente dio un giro drástico este sábado, cuando el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó que aviones estadounidenses bombardearon tres instalaciones nucleares clave en Irán: Isfahán, Natanz y Fordo, siendo esta última el blanco principal.
El anuncio fue hecho directamente por el mandatario en su cuenta de Truth Social, donde afirmó: “Hemos completado con gran éxito nuestro ataque contra las tres instalaciones nucleares de Irán, incluyendo Fordow, Natanz e Isfahán. Todos los aviones se encuentran ahora fuera del espacio aéreo iraní”.
Trump también detalló que el ataque sobre Fordo fue el más contundente, describiéndolo como una operación con una “carga completa de bombas”. Aunque no se han difundido reportes oficiales sobre víctimas o daños estructurales específicos, medios iraníes han comenzado a reportar explosiones en distintas regiones del país.
La ofensiva ocurre apenas días después de que la Casa Blanca anunciara que el presidente evaluaría una posible intervención militar en Irán dentro de un plazo de dos semanas, como parte de una última oportunidad para presionar negociaciones sobre el programa nuclear iraní. Ese plazo no se cumplió. La decisión se aceleró.
Fordo, ubicada al sur de Teherán, es una instalación subterránea considerada una de las piezas más sensibles del programa nuclear iraní. Su ataque representa una señal clara de que Washington está dispuesto a escalar el conflicto más allá de las sanciones económicas o la presión diplomática.
Natanz, por su parte, ha sido en años anteriores blanco de ciberataques y presiones internacionales. Es donde Irán ha llevado a cabo parte de su enriquecimiento de uranio. El ataque a Isfahán también tiene fuerte carga simbólica, ya que allí se ubica una planta de conversión nuclear y una base militar relevante.
Aunque desde el Pentágono aún no se ha ofrecido una rueda de prensa formal, fuentes militares citadas por medios estadounidenses hablan de una operación “quirúrgica y limitada”, aunque el impacto regional y político aún es incierto.
La comunidad internacional sigue de cerca el desarrollo de los hechos. Las reacciones oficiales por parte del gobierno iraní y sus aliados aún no han sido emitidas, pero se espera una respuesta contundente en las próximas horas.
Lo que está claro es que el conflicto entre Irán y Estados Unidos ha cruzado una nueva línea. Y la estabilidad de la región, y posiblemente del mundo, podría cambiar a partir de hoy.