María Isabel Castillo fue la primera dominicana en México, ahora llega a Washington.
NUEVA YORK.- Con un gesto firme y una sonrisa diplomática, María Isabel Castillo Báez presentó oficialmente sus cartas credenciales al presidente Donald J. Trump, formalizando así su rol como nueva embajadora extraordinaria y plenipotenciaria de la República Dominicana ante los Estados Unidos.
La ceremonia, celebrada en la Oficina Oval de la Casa Blanca, cumplió con los protocolos de rigor y marca el inicio oficial de una misión diplomática que, según afirmó la embajadora, buscará reforzar los vínculos históricos y estratégicos entre ambas naciones.
El acto tuvo lugar este miércoles 9 de abril de 2025, como había sido informado por el Ministerio de Relaciones Exteriores (MIREX), confirmando la designación que responde a una estrategia de fortalecimiento de la presencia dominicana en escenarios clave de la política internacional.
Trayectoria y visión: una diplomática de experiencia
Castillo Báez no es nueva en el arte diplomático. Fue la primera mujer dominicana en encabezar la embajada en México, y ahora asume uno de los puestos más relevantes del servicio exterior dominicano.
Su trayectoria combina experiencia, preparación y una visión centrada en la defensa de los intereses nacionales y el impulso de una agenda bilateral renovada.
“Mi compromiso es trabajar por una relación sólida, basada en el respeto, el diálogo y la cooperación mutua”, expresó en una publicación compartida en sus redes sociales tras la ceremonia.
La embajadora hizo especial énfasis en temas prioritarios como el comercio bilateral, la seguridad regional y la migración, áreas donde República Dominicana y Estados Unidos mantienen intereses comunes y desafíos compartidos.
Nueva etapa en las relaciones dominico-estadounidenses
La llegada de Castillo Báez a la legación dominicana en Washington representa una apuesta clara por la diplomacia activa y estratégica, en un contexto internacional marcado por transformaciones geopolíticas y nuevos retos hemisféricos.
Con su acreditación ya oficializada ante el jefe de Estado estadounidense, la embajadora asume el liderazgo de la misión diplomática en un momento crucial, con la mirada puesta en fortalecer la comunidad dominicana en EE.UU., promover inversiones y defender los intereses del país en espacios multilaterales.