Milicia iraquí alineada con Irán advierte ante injerencia militar estadounidense
La poderosa milicia chií Kataib Hezbolá, alineada con Irán y con fuerte presencia en Irak, lanzó una contundente advertencia este domingo: atacará las bases militares de Estados Unidos si Washington decide intervenir en el conflicto entre Irán e Israel.
La amenaza se produce en un momento de máxima tensión regional, tras semanas de escaladas bélicas y amenazas cruzadas.
El grupo armado aseguró que no necesita apoyo externo para enfrentar a las tropas estadounidenses y que cuenta con “los hombres y medios suficientes” para ejercer una respuesta disuasoria inmediata.
Las declaraciones fueron difundidas por la cadena libanesa Al Mayadín, considerada afín a los movimientos proiraníes en la región.
“Vigilamos todos los movimientos de las fuerzas estadounidenses en la región y actuaremos sin vacilar si se suman a la guerra”, afirmó un portavoz del grupo.
Acusan a EE.UU. de amenazar la estabilidad regional
La milicia instó al Gobierno iraquí y a la llamada “oposición leal” a asumir su rol ante lo que consideran una inminente expansión del conflicto. Entre sus demandas figura el cierre de la embajada de Estados Unidos en Bagdad y la expulsión inmediata de todas las tropas extranjeras del territorio iraquí.
“La presencia de EE.UU. es la amenaza más clara y peligrosa a la seguridad de Irak y de toda la región”, subrayaron.
En la actualidad, Estados Unidos mantiene cerca de 2,500 soldados en suelo iraquí, como parte del esfuerzo internacional para contener al grupo terrorista Estado Islámico.
Sin embargo, estas tropas han sido objeto de múltiples ataques en los últimos meses, especialmente tras el inicio de la ofensiva israelí en Gaza el 7 de octubre de 2023, que desató una cadena de represalias en varios frentes.
Bases bajo fuego: advertencia que activa las alarmas
Las bases estadounidenses en Irak y Siria han sido blanco de reiterados ataques con drones y cohetes, atribuidos a milicias proiraníes en respuesta al respaldo estadounidense a Israel.
De manera que con el nuevo pronunciamiento de Kataib Hezbolá, la posibilidad de una escalada directa y generalizada adquiere una dimensión más peligrosa.
Esta declaración se suma a la creciente presión sobre el gobierno iraquí, que se ve atrapado entre las demandas nacionalistas, el alineamiento religioso con Irán y su compromiso diplomático con Washington.
Mientras tanto, la región se mantiene en vilo, con la mirada puesta en los próximos pasos de Estados Unidos, que deberá decidir si interviene directamente en un conflicto que, cada día más, rompe las fronteras y los silencios. Con datos de Europa Press.
