Ambos países impulsan la modernización estatal y la formación diplomática
La República Dominicana y Brasil acaban de firmar dos memorandos que marcan un paso importante en su colaboración bilateral. Esta vez, el foco está puesto en mejorar la gestión pública y en robustecer la formación del personal diplomático de ambas naciones.

Uno de los acuerdos, firmado entre el Ministerio de Administración Pública dominicano y el Ministerio de Gestión e Innovación de los Servicios Públicos de Brasil, apunta directamente a modernizar el aparato estatal. No es solo un compromiso simbólico: ambas partes se comprometen a intercambiar ideas y aplicar buenas prácticas en áreas clave como gobierno digital, innovación, recursos humanos y diversidad.
La idea es transformar los servicios públicos en estructuras más ágiles, inclusivas y enfocadas en el ciudadano. Esto incluye mejorar la forma en que se evalúa el desempeño del personal, avanzar hacia una carrera administrativa más justa y eficiente, y perfeccionar los procesos de contratación. También se habla de combatir el acoso, impulsar políticas de inclusión y proteger la salud y seguridad de los empleados públicos.
Otro punto relevante: se promoverá el uso de herramientas digitales para trámites administrativos, lo que puede traducirse en instituciones más rápidas y menos burocráticas. El acuerdo, que tiene una vigencia inicial de tres años a partir de junio de 2025, puede renovarse si ambas partes lo desean. Si alguna quiere darlo por terminado antes, también podrá hacerlo sin mayores complicaciones.
El segundo memorando fue firmado entre los institutos de formación diplomática de ambos países: el Instituto Rio Branco, de Brasil, y el INESDYC, de República Dominicana. Este pacto se enfoca en elevar la preparación académica y profesional de los diplomáticos.
Entre los compromisos asumidos destacan el intercambio de estudiantes, docentes y expertos, tanto de manera presencial como virtual. También se coordinarán seminarios, cursos, investigaciones y publicaciones sobre temas vinculados a las relaciones internacionales, el derecho internacional, la economía, la sociología y otras disciplinas esenciales para la diplomacia moderna.
Uno de los puntos más interesantes de este acuerdo es que ambas instituciones se comprometen a compartir no solo conocimientos, sino también visiones sobre los desafíos globales actuales y cómo deben abordarse desde la formación diplomática.
Ambos memorandos fueron firmados por el canciller dominicano Roberto Álvarez. En el primero, lo hizo junto a Esther Dweck, ministra brasileña de Gestión e Innovación Pública. En el segundo, con su homólogo brasileño Mauro Vieira.
Aunque son documentos técnicos, detrás de ellos hay una intención clara: modernizar el Estado y formar diplomáticos mejor preparados para enfrentar un mundo más complejo, cambiante y conectado. Para países como República Dominicana y Brasil, este tipo de acuerdos puede marcar la diferencia entre un aparato público que reacciona tarde y uno que anticipa, actúa y responde mejor a su gente.