Aunque la Educación Inicial mejora tras pandemia persisten desigualdades y abandono escolar en niveles críticos
SANTO DOMINGO. — La Iniciativa Dominicana por una Educación de Calidad (IDEC) lanzó un grito de alerta en su Informe de Seguimiento y Monitoreo 2024: uno de cada cuatro adolescentes entre 15 y 17 años está fuera del sistema escolar. Aún más preocupante, más del 33% de los jóvenes entre 20 y 24 años no ha logrado completar el nivel secundario, revelando una profunda crisis educativa.
El estudio, presentado esta semana en la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), advierte que la pandemia de COVID-19 provocó un retroceso significativo en los avances logrados en cobertura escolar, especialmente en la población adolescente. Sin embargo, en el grupo de 12 a 14 años se reporta una reducción de la inasistencia a un 6.68%, por debajo de los niveles prepandemia.
El informe subraya que las tasas de abandono escolar temprano siguen siendo elevadas, especialmente entre adolescentes con condiciones especiales y entre los estudiantes extranjeros, cuya presencia en el sistema educativo disminuye drásticamente con la edad: de un 9.5% a los seis años, bajan al 5.9% a los 17 años.
Además, las niñas continúan destacándose con mejores puntuaciones que los niños en todas las áreas, y los estudiantes en tanda extendida presentan una ligera ventaja académica frente a los de tandas regulares.
Analfabetismo juvenil crece en zonas fronterizas y rurales empobrecidas
Una de las revelaciones más críticas del informe es el aumento del analfabetismo entre jóvenes de 15 años en adelante, que alcanzó el 6% en 2024. Esta cifra representa un repunte frente a 2023 (5.69%) y evidencia una realidad más severa en provincias fronterizas: Pedernales (16.2%), Elías Piña (14%) e Independencia (13.3%), según datos de la ONE y el Sistema de Indicadores Sociales (Sisdom).
A pesar de los esfuerzos del Servicio Permanente de Alfabetización (SEPA) —que reportó 2,719 personas alfabetizadas y más de 25 mil registradas en 2024— el ritmo de mejora sigue siendo insuficiente.
Por ello, IDEC recomienda ampliar la oferta de alfabetización en coordinación con la sociedad civil, con un enfoque de continuidad educativa y sostenibilidad a largo plazo.
Educación pública gana terreno frente al rezago del sector privado
El informe también expone un panorama más alentador en la educación inicial. Más del 61% de los niños de entre 3 y 5 años asiste a centros escolares, un salto significativo respecto al 34.9% registrado durante la pandemia (2020-2021). En el grupo de 0 a 2 años, la cobertura alcanzó apenas el 7.3 %, aunque también con señales de mejora.
Este crecimiento, sin embargo, ha sido desigual. Mientras el sector público logró expandirse, el privado no se ha recuperado con la misma velocidad: su participación cayó de 51.9% a 44.6% en matrícula del Nivel Inicial. En contraste, la matrícula en pre-kínder aumentó un 79% y en kínder un 111% en centros públicos, entre los años escolares 2019-2020 y 2023-2024.
Uno de los desafíos persistentes es la construcción incompleta de los Centros de Atención Integral a la Primera Infancia (Caipi). De los 251 proyectados, solo 130 han sido terminados. Hasta diciembre de 2024, solo el 3.8% de los niños de 0 a 2 años eran atendidos por estos centros (unos 21,187 infantes).
Durante el acto de presentación, el ministro de Educación, Luis Miguel De Camps, destacó mejoras en las evaluaciones diagnósticas de sexto grado, particularmente en Lengua Española (70.1%) y Ciencias Naturales (59.1%), en comparación con 2018.
También resaltó el crecimiento sostenido en la matrícula del nivel inicial y la expansión de modalidades técnico-profesionales y artísticas, que pasó de 19.24% en 2017-2018 a 31.11% en 2023-2024.
A pesar de los avances, De Camps admitió que persisten brechas de calidad y desigualdad, por lo que la política educativa actual se enfoca en un modelo más cercano, inclusivo y eficiente, basado en cinco pilares: estudiantes, familias, docentes, servidores públicos y sociedad civil.
Finalmente, agradeció el rol de IDEC y su informe como una herramienta clave para la mejora continua del sistema educativo dominicano.