Un estudio revela concentración, barreras de entrada y poca movilidad de afiliados
Un nuevo estudio de la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (ProCompetencia) expone la realidad del mercado de las Administradoras de Riesgos de Salud (ARS) en la República Dominicana. El informe, que cubre el período 2010-2024, revela que tres entidades —SENASA, PRIMERA y MAPFRE— acaparan más del 70% del mercado.
Esto no es un simple dato. Es una señal de alerta: el índice de concentración Herfindahl-Hirschman (IHH) se sitúa en 2,136 puntos, lo cual, según los estándares internacionales, indica que el mercado necesita vigilancia constante.
¿Por qué no entran nuevos jugadores? Porque es muy costoso y complicado. Las trabas son muchas: requisitos regulatorios pesados, altos costos operativos y la necesidad de crear redes de prestadores, algo que solo las grandes ARS pueden sostener. A eso se suman prácticas que favorecen a las más grandes, como el sistema automático que asigna afiliados a la ARS con más empleados en una empresa.
Para la presidenta de ProCompetencia, María Elena Vásquez Taveras, esta regla “aparentemente técnica” termina siendo una barrera real para la competencia y el derecho del ciudadano a elegir. Además, hay muy poca movilidad entre ARS: aunque el cambio es legalmente posible, en la práctica hay obstáculos que lo dificultan.
Esto debilita uno de los pilares de un mercado competitivo: la posibilidad de que los usuarios premien con su elección a quien les ofrece un mejor servicio.
El estudio también destaca el rol positivo de SENASA, la ARS pública, que ha ayudado a bajar costos y mejorar el acceso. Su participación, lejos de ser un problema, ha obligado a las privadas a moderar márgenes y ser más eficientes.
El informe se basa en datos oficiales de SISALRIL, la TSS y el Banco Central. Su meta no es solo diagnosticar, sino abrir una conversación seria sobre cómo reformar el sistema para que haya más competencia real.
Entre las recomendaciones están revisar cómo se asignan los afiliados, aumentar la transparencia, implementar con seriedad la atención primaria y eliminar trabas regulatorias que frenan la entrada de nuevas ARS.
Vásquez Taveras fue clara: el país necesita un sistema de salud justo, competitivo y que funcione para la gente, no solo para los grandes jugadores.
