Exportaciones caen, falta mano de obra y el futuro del sector es incierto
MAO, VALVERDE.– El sector bananero de la Línea Noroeste atraviesa uno de sus peores momentos. Productores y exportadores de banano orgánico advierten que están al borde de la quiebra debido a una tormenta perfecta: caída de exportaciones, escasez de mano de obra extranjera y ausencia de financiamiento estatal.
La alarma fue encendida por el presidente de la Asociación Dominicana de Productores de Banano (ADOBANANO), Gil Blas Martínez, durante un encuentro en Mao con representantes de varias asociaciones agrícolas. Allí, expuso el panorama sombrío que enfrentan miles de familias que dependen de este cultivo. “Si no se actúa pronto, muchas fincas desaparecerán, arrastrando consigo el sustento de comunidades enteras”, advirtió Martínez.
El descenso en las exportaciones ha sido dramático. En 2023, las ventas al extranjero alcanzaron los 300 millones de dólares. En 2024, cayeron a 220 millones y para este año se proyecta un desplome aún mayor. Las cifras reflejan un declive que, según los productores, no ha sido mitigado con políticas públicas eficaces.
Uno de los factores que agravan la crisis es la escasez de mano de obra. Las recientes deportaciones de trabajadores haitianos han dejado los campos semivacíos. Aunque los productores no se oponen a la política migratoria del Gobierno, critican la forma “indiscriminada” en que se ejecutan las repatriaciones. “La mayoría de nuestros trabajadores están carnetizados, muchos con pasaporte en mano, pero los trámites para renovar sus documentos en los consulados haitianos tardan meses y resultan costosos”, denunciaron.
Actualmente, se estima que las fincas bananeras de la región requieren unos 15 mil trabajadores extranjeros, cifra que los líderes del sector consideran manejable si se agilizan los procesos de legalización y renovación de documentos.
El problema no termina ahí. Los bananeros también se quejan de la falta de un seguro agrícola efectivo. Señalan que la institución estatal encargada de asegurar sus cultivos acumula una deuda de más de 150 millones de pesos. A esto se suman las nuevas exigencias de la Unión Europea en cuanto a inspecciones y dimensiones de las plantaciones, que han incrementado los costos sin apoyo estatal para cubrirlos.
Durante el encuentro, los productores estuvieron acompañados del abogado y exfuncionario Ángel Lockward, quien rememoró cómo, en 1994, se logró la cuota bananera para República Dominicana en la Unión Europea, gracias a la diplomacia del presidente Joaquín Balaguer. Lockward estuvo acompañado por José Domínguez (Cheo) y Domingo Plácido, y respaldó el llamado urgente de los productores al presidente Luis Abinader.
Entre los asistentes estuvieron también Martín Peña, César Domínguez, José Jiménez, Lorenzo Fernández, Radhamés Gómez Guzmán y Carlos Peguero, quienes coincidieron en que la situación exige una respuesta inmediata y contundente por parte del Gobierno. De lo contrario, advirtieron, el país podría perder una de sus principales fuentes de divisas agrícolas y sumir aún más en la pobreza a la Línea Noroeste.