Tom Thibodeau se va tras cinco años de estabilidad competitiva
NEW YORK. — En un giro sorpresivo, los New York Knicks anunciaron este martes el cese de Tom Thibodeau como entrenador principal del equipo, apenas semanas después de alcanzar la final de la Conferencia Este en los playoffs de la NBA.
A sus 67 años, Thibodeau deja la franquicia tras cinco temporadas marcadas por una notable reconstrucción y cuatro clasificaciones a postemporada.
La decisión fue comunicada por el presidente del equipo, Leon Rose, quien subrayó que la organización está decidida a enfocar todos sus esfuerzos en conquistar un campeonato, lo que implica “tomar otro rumbo” en el liderazgo técnico.
“Nuestra organización está enfocada exclusivamente en ganar un campeonato para nuestra afición. Este objetivo nos llevó a la difícil decisión de informar a Tom Thibodeau que hemos decidido tomar otro rumbo”, declaró Rose a través de un comunicado oficial.
Thibodeau se despide con legado competitivo y respeto interno
Durante su gestión, Thibodeau transformó a los Knicks de un equipo estancado en la mediocridad a un contendiente serio en el Este.
Su rigurosidad táctica, su enfoque defensivo y su liderazgo constante llevaron al equipo a una de sus etapas más sólidas en las últimas décadas, coronadas este año con una dura serie ante los Indiana Pacers, que los vencieron 4-2 en la final de conferencia.
“Le agradecemos enormemente a Tom por su dedicación incondicional cada día… Nos guió con clase y profesionalismo”, añadió Rose, destacando que el entrenador consiguió cuatro victorias en series de playoffs y un fuerte vínculo con la cultura de los Knicks.
La franquicia prioriza el futuro inmediato y un cambio profundo
Aunque Thibodeau gozaba del respaldo de gran parte de la afición y del vestuario, el alto mando decidió que era momento de un cambio. La organización, propiedad del grupo MSG Sports, indicó que ya está en búsqueda de un nuevo entrenador que “comparta la visión competitiva inmediata” de la directiva.
“Tom siempre será parte de nuestra familia Knicks y le deseamos lo mejor en el futuro”, concluyó el comunicado.
La salida de Thibodeau marca el fin de una era que, si bien no trajo trofeos, restituyó la dignidad y competitividad de los Knicks en la élite de la NBA.