Millones se movilizan por carretera y avión en todo el país. Turismo internacional cae ante política migratoria y tensiones globales
Nueva York. – Aunque su propósito original es rendir homenaje a los caídos en servicio militar, el Día de los Caídos (Memorial Day) se ha convertido también en una fecha clave para la movilidad nacional en Estados Unidos.
Este lunes 26 de mayo, más de 45 millones de personas emprendieron viajes de al menos 80 kilómetros fuera de sus hogares, según estimaciones de la American Automobile Association (AAA), marcando así una de las mayores movilizaciones por carretera desde 2005.
El feriado federal —oficializado en 1971 y celebrado el último lunes de mayo— combina solemnidad y descanso. En la capital del país, los actos conmemorativos incluyen el discurso presidencial y la colocación de ofrendas en el Cementerio Nacional de Arlington, así como un minuto de silencio nacional a las 3:00 p. m., conforme a la Ley del Recuerdo Nacional aprobada por el Congreso en el año 2000.
El automóvil domina las rutas con precios de gasolina más bajos
La AAA estima que alrededor del 87 % de los viajeros, es decir, unos 39 millones, utilizaron vehículos para sus desplazamientos. Uno de los incentivos principales ha sido la caída del precio promedio de la gasolina, que se sitúa en 3.20 dólares por galón, notablemente inferior a los 3.61 del año pasado.
Desde el jueves 22 de mayo, los aeropuertos, carreteras interestatales y sistemas de transporte público del país comenzaron a experimentar una demanda sin precedentes. Las ciudades costeras, los parques nacionales y los destinos rurales han sido los más concurridos.
Mientras tanto, las actividades patrióticas como los desfiles tradicionales, visitas a monumentos y participación en eventos comunitarios se han mantenido como parte integral del fin de semana largo, combinando con éxito el homenaje a los caídos con el disfrute familiar.
La tensión migratoria enfría el interés del turismo internacional
Aunque el turismo interno ha experimentado un auge notable, el flujo internacional hacia Estados Unidos muestra señales de desaceleración. De acuerdo con analistas del sector, el endurecimiento del discurso político, las medidas migratorias restrictivas, las detenciones fronterizas y los nuevos aranceles implementados por la administración de Trump han generado un efecto disuasivo en viajeros extranjeros.
Esta tendencia marca un contraste importante respecto a años anteriores, cuando el Memorial Day atraía a miles de turistas internacionales. En 2025, sin embargo, el foco está en el consumo doméstico, con familias optando por redescubrir sus propias ciudades y estados, apoyando la economía nacional y las pequeñas empresas turísticas.