Tasa de informalidad cae al nivel más bajo desde que hay registros
Santo Domingo. – La economía dominicana continúa dando señales de solidez en su mercado laboral. Al cierre del primer trimestre de 2025, el país sumó 176,581 nuevos ocupados netos en comparación con el mismo período del año anterior, según los resultados preliminares de la Encuesta Nacional Continua de Fuerza de Trabajo (ENCFT), publicada este domingo por el Banco Central de la República Dominicana (BCRD).
Este crecimiento, indica el informe, llevó el número total de personas ocupadas a 5,117,548, cifra que incluye tanto empleos formales como informales. Sin embargo, lo más destacado es el incremento del empleo formal: de los nuevos ocupados, 188,658 corresponden a empleos con acceso a seguridad social, mientras que el número de trabajadores informales se redujo en 12,077. Este cambio permitió que la tasa de informalidad laboral descendiera al 53.4 %, el nivel más bajo desde que existen registros de la ENCFT.
Además, la tasa de ocupación alcanzó un histórico 62.8 %, superando en 1.2 puntos porcentuales (p.p.) el valor registrado en el primer trimestre de 2024. Este indicador, que mide la proporción de personas ocupadas respecto a la población en edad de trabajar, refleja una expansión notable del mercado laboral.
El desempleo también mostró señales positivas. La tasa de desocupación abierta, que mide a quienes buscan trabajo activamente, bajó de 5.1 % a 4.9 % en un año. A su vez, la tasa de subutilización ampliada (SU3), que también incluye a quienes desean trabajar aunque no estén buscando empleo activamente, cayó de 10.9 % a 9.3 %, una disminución de 1.6 p.p.
En cuanto a la participación de la población en el mercado laboral, la tasa global de participación (TGP) llegó al 66.0 %, su valor más alto en la serie estadística del BCRD. Esto indica que más personas están activamente integradas al mundo laboral, ya sea buscando empleo o trabajando.
Estos resultados reafirman la tendencia positiva que ha caracterizado al mercado laboral dominicano en los últimos trimestres. El crecimiento del empleo formal, junto a la reducción del desempleo y la informalidad, apunta hacia una economía que no solo está generando más puestos de trabajo, sino también mejor calidad en las condiciones laborales.
La mejora de estos indicadores laborales refleja los efectos de una economía en recuperación y crecimiento sostenido, así como políticas orientadas a la formalización del empleo y el fortalecimiento de la seguridad social.