El IPPP lamenta la partida del periodista y exsecretario del SNPP
El periodismo dominicano perdió el viernes 16 de mayo a una de sus figuras más emblemáticas: Miguel Hernández, veterano comunicador, gremialista y defensor incansable de la libertad de prensa y diplomático. Su deceso fue confirmado por el Instituto de Previsión y Protección del Periodista (IPPP), que calificó su partida como una pérdida irreparable para el país.
Hernández, quien había enfrentado múltiples complicaciones de salud desde 2015 a raíz de varios accidentes cerebrovasculares, murió tras años de tratamiento médico, tanto en República Dominicana como en Estados Unidos, donde fue intervenido quirúrgicamente del corazón. Tenía 88 años.
Olivo De León, presidente del IPPP, resaltó la trayectoria de Hernández, quien dedicó su vida al fortalecimiento del periodismo desde todas sus trincheras. Fue fundador y primer secretario general del Sindicato Nacional de Periodistas Profesionales (SNPP), elegido apenas días después de su creación, el 15 de septiembre de 1965, en un contexto marcado por la posguerra de la Revolución de Abril.
Periodista, preso político y revolucionario
La historia de Miguel Hernández está profundamente ligada a la lucha por la democracia y la libertad de prensa. Durante la dictadura de Rafael Leónidas Trujillo fue encarcelado y recibió siete disparos mientras estaba detenido, los cuales dañaron órganos vitales como el riñón y la vejiga. A pesar de esto, jamás abandonó su compromiso con el periodismo.
Participó activamente en la Revolución de 1965, formando parte del Comando de Prensa, desde donde redactó y firmó un comunicado que condenaba la intervención militar estadounidense y exigía el reconocimiento de Francisco Alberto Caamaño Deñó como presidente legítimo del país.
Impulsor del Colegio de Periodistas
Hernández no solo fue pieza clave en el nacimiento del SNPP. Junto a un grupo de colegas, luchó incansablemente por la aprobación de la Ley 148-83, que dio origen al Colegio Dominicano de Periodistas, una conquista histórica del gremio.
Fue también reconocido internacionalmente: en 1964 representó al país en un congreso en Brasil, donde denunció la represión que sufrían los periodistas bajo el gobierno del triunvirato. Su intervención logró que se aprobara una resolución de condena contra ese régimen por atentar contra la libertad de prensa.
Una vida de lucha y coherencia
Nacido en Puerto Plata, de origen humilde, Hernández llegó a Santo Domingo siendo joven y trabajó como obrero en la construcción de la Feria de la Paz. Su vocación por la comunicación lo llevó a convertirse en un referente del periodismo nacional, conductor del programa “Cuarto Poder” y embajador en Taiwán durante el gobierno de Hipólito Mejía.
El legado de Miguel Hernández es inmenso: valentía, coherencia y compromiso con la verdad. Su vida es un testimonio de que el periodismo es, por encima de todo, un acto de servicio y de lucha por la justicia.
