El mandatario convoca a exmandatarios para abordar situación de Haití
Santo Domingo.- En un gesto de madurez política poco frecuente en el Caribe, el presidente Luis Abinader convocó a los expresidentes Leonel Fernández, Hipólito Mejía y Danilo Medina a una reunión en el Ministerio de Defensa para abordar de forma conjunta la creciente crisis en Haití y su impacto en la seguridad nacional de la República Dominicana.
La reunión, celebrada la tarde del lunes en la sede del Ministerio de Defensa, inició con la llegada puntual del mandatario, quien fue seguido por sus antecesores en orden cronológico. Primero arribó Leonel Fernández, luego Hipólito Mejía y, finalmente, Danilo Medina. El presidente Abinader, junto al ministro de Defensa, teniente general Carlos Antonio Fernández Onofre, recibió personalmente a los exjefes de Estado, agradeciéndoles su disposición para participar en este encuentro de alto nivel.
Durante aproximadamente diez minutos, los cuatro líderes sostuvieron una conversación privada en la planta baja del edificio, un espacio que, aunque breve, dio inicio a una jornada de diálogo nacional en torno a un tema que ha encendido las alarmas del país.
Tras esta conversación inicial, los mandatarios salieron al frente del edificio, donde recibieron los honores correspondientes de parte de las Fuerzas Armadas. Luego, se dirigieron al salón de reuniones del despacho del ministro de Defensa, donde formalmente comenzó la reunión a las 4:10 de la tarde.
La primera parte del encuentro contó con la presencia de figuras clave del gabinete de seguridad nacional: el canciller Roberto Álvarez; el comandante general del Ejército, Jorge Camino Pérez; el director del Departamento Nacional de Investigaciones (DNI), Luis Soto; el director general de Migración, vicealmirante Luis Rafael Lee Ballester; y el embajador dominicano en Haití, Faruk Miguel Castillo. Estos funcionarios ofrecieron un panorama detallado sobre el estado actual de la frontera, la situación humanitaria en Haití y las medidas de control migratorio implementadas en los últimos meses.
Sin embargo, fue en la segunda parte de la reunión donde se produjo el intercambio más reservado. Solo permanecieron el presidente Abinader y los expresidentes Fernández, Mejía y Medina. Aunque no se ofrecieron detalles específicos de lo discutido, fuentes del entorno gubernamental aseguraron que se trató de un diálogo franco sobre estrategias de política exterior, seguridad nacional y unidad política frente a un escenario regional complejo.
La imagen de los cuatro líderes reunidos en un mismo espacio —más allá de sus diferencias ideológicas o partidarias— envía un mensaje claro: la República Dominicana apuesta por la cohesión interna para enfrentar la inestabilidad en su frontera oeste. En tiempos de crisis, el liderazgo compartido puede marcar la diferencia entre la tensión y la solución.
