Presidente y antecesores acuerdan política unificada ante crisis en Haití
Santo Domingo.- En un hecho inédito en la política dominicana reciente, el presidente Luis Abinader se reunió con los expresidentes Hipólito Mejía, Leonel Fernández y Danilo Medina en la sede del Ministerio de Defensa. El encuentro, celebrado en un ambiente solemne pero cargado de urgencia, giró en torno a la crítica situación en Haití y su impacto directo en la República Dominicana.
La reunión comenzó con una recepción protocolar encabezada por el teniente general Carlos Antonio Fernández Onofre, ministro de Defensa. Luego de un intercambio privado entre los líderes, se inició la sesión oficial a las 4:10 p. m., con la participación de altos mandos del Gobierno y organismos de seguridad.
Lo anunciado tras el encuentro marca una hoja de ruta clara para enfrentar una de las crisis más delicadas en la región. El vocero gubernamental, Homero Figueroa, acompañado por los representantes de prensa de los expresidentes, presentó los acuerdos principales alcanzados.
Entre los puntos clave se destaca la creación de un espacio de trabajo conjunto entre el actual gobierno y los exmandatarios, con el objetivo de formular una política nacional unificada respecto a Haití. Este grupo también recibirá informes periódicos sobre el estado de la seguridad nacional.
Otro paso concreto será la convocatoria formal del Consejo Económico y Social (CES), órgano que permitirá canalizar propuestas multisectoriales sobre la situación. Asimismo, se definió el compromiso de elaborar y promover una política exterior conjunta, que será sustentada en acuerdos bilaterales entre Abinader y los expresidentes.
- Los cuatro líderes reconocieron que Haití atraviesa una de las peores crisis humanitarias e institucionales de su historia reciente. También coincidieron en que esta crisis representa una amenaza directa para la seguridad y estabilidad de la República Dominicana.
En ese sentido, valoraron los esfuerzos del actual Gobierno por alertar a la comunidad internacional, así como las gestiones diplomáticas ante el Consejo de Seguridad de la ONU, Estados Unidos y otros organismos internacionales.
El tema migratorio ocupó un espacio relevante en la conversación. Se respaldaron las medidas implementadas para reforzar el control en la frontera, junto a los operativos de repatriación de personas en situación migratoria irregular. Los exmandatarios insistieron en la aplicación firme —pero respetuosa de los derechos humanos— de la Ley de Migración.
Uno de los consensos más contundentes fue la afirmación de que la República Dominicana no puede ni debe cargar sola con el peso de la crisis haitiana. “No hay ni habrá solución dominicana al problema haitiano”, reiteraron los líderes.
Este encuentro, sin precedentes por su nivel y contenido, envía un mensaje potente: la estabilidad nacional frente a la crisis de Haití requiere unidad de Estado, más allá de las diferencias políticas. En un momento de alta tensión regional, los líderes dominicanos decidieron actuar en bloque.
