Duplicará la financiación actual de la fundación de 100.000 millones de dólares desde su creación,
En una decisión que marca un giro trascendental en la filantropía global, Bill Gates anunció que su fundación cerrará en 2045, tras una etapa final de acelerada inversión humanitaria que alcanzará más de 200.000 millones de dólares.
El cofundador de Microsoft y uno de los hombres más influyentes del siglo XXI aseguró que dedicará “prácticamente toda su fortuna” en los próximos 20 años a la Fundación Gates, adelantando el cierre de la entidad, que inicialmente no tenía una fecha límite.
La medida implica duplicar la financiación actual de la fundación, que ya ha movilizado más de 100.000 millones de dólares desde su creación, impactando positivamente en salud, educación y acceso a vacunas en países en desarrollo.
Este anuncio ocurre en un contexto de retrocesos en la cooperación internacional, con potencias como Estados Unidos, Reino Unido y Francia reduciendo su aporte a programas clave de la Organización Mundial de la Salud, especialmente en áreas como la lucha contra el VIH y la polio, debido a reorientaciones hacia gasto militar frente a amenazas geopolíticas.
Además, Gates aprovechó el momento para lanzar una dura crítica al también multimillonario Elon Musk, por supuestos recortes a la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) vinculados a sus influencias dentro del Departamento de Eficiencia Gubernamental.
“La imagen del hombre más rico del mundo matando a los niños más pobres del mundo no es agradable”, declaró Gates en una entrevista al Financial Times, sin mencionar a Musk directamente, pero en alusión clara a sus políticas.
Con el cierre programado para el 31 de diciembre de 2045, la Fundación Gates se convertirá en uno de los proyectos filantrópicos más ambiciosos y acotados en tiempo de la historia, sentando un precedente en la forma en que los grandes patrimonios pueden ejercer impacto directo y limitado por diseño.
El anuncio ha generado debate en la comunidad internacional, donde muchos analistas ven esta estrategia como una respuesta tanto a la urgencia climática y sanitaria global, como a la ineficiencia creciente de organismos multilaterales para abordar crisis estructurales.
La fundación de Bill Gate emitio un comunciado que recoge la agencia Europa Press