Con un total de 8938 fallecidos registrados establece cifras récord de muertes migratorias
El año 2024 se ha convertido en el más fatal para los migrantes en todo el mundo, con al menos 8938 personas fallecidas en rutas migratorias, según un informe de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
Entre las cifras más impactantes se encuentran las 341 muertes en el Caribe y las 174 muertes en el Tapón del Darién, la peligrosa selva entre Colombia y Panamá.
Dichas cifras representan un récord histórico para ambas regiones, destacando los riesgos extremos que enfrentan quienes intentan cruzar estas rutas en busca de mejores condiciones de vida.
Este número supera los registros de años anteriores, consolidando una tendencia alarmante de aumento de muertes año tras año desde 2019.
Además, el informe revela que 2024 también fue el año más mortal en otras regiones.
En Asia, se registraron 2778 muertes, muchas de ellas relacionadas con los movimientos migratorios de la etnia rohinyá de Myanmar y de bangladesíes en la bahía de Bengala.
En África, se documentaron 2242 muertes, mientras que en Europa hubo 233 fallecimientos, principalmente en el mar Mediterráneo y el desierto del Sahara, áreas conocidas como "cementerios de migrantes".
Violencia y falta de rutas seguras impulsan aumento de muertes globales
La violencia ha sido uno de los factores más determinantes en las muertes de migrantes.
Desde 2022, al menos el 10% de las muertes registradas ocurrieron en contextos violentos.
En 2024, casi 600 personas perdieron la vida en rutas migratorias de Asia meridional y el sudeste asiático, muchas de ellas víctimas de ataques y abusos durante su travesía.
Muertes y desapariciones podrían ser mucho mayor
La OIM subraya que la cifra real de muertes y desapariciones podrían ser mucho mayor, ya que muchos casos no se documentan debido a la falta de fuentes oficiales.
Además, la mayoría de las víctimas no han sido identificadas, lo que deja a sus familias en una situación de desesperación y dolor sin respuestas.
Julia Black, coordinadora del Proyecto Migrantes Desaparecidos de la OIM, destacó que "el aumento en la cifra de muertes es terrible, pero el hecho de que miles sigan sin ser identificados cada año es aún peor".
También señaló que la falta de datos completos sobre los peligros que enfrentan los migrantes dificulta la implementación de respuestas efectivas para prevenir futuras tragedias.
La OIM reiteró la necesidad de establecer rutas migratorias seguras y regulares, así como de mejorar los sistemas de búsqueda y rescate para evitar que más personas pierdan la vida en su búsqueda de un futuro mejor.
Este informe es un llamado urgente a la comunidad internacional para abordar esta crisis humanitaria con soluciones concretas y sostenibles. Con datos de Agerncias IPS
