Carlos Sánchez Solimán respalda la medida por su impacto positivo
Santo Domingo, RD.- El doctor Carlos Sánchez Solimán, médico especialista en nutrición infantil y exdiputado al Parlamento Centroamericano (PARLACEN), ha manifestado su apoyo al impuesto sobre bebidas azucaradas propuesto en el anteproyecto de ley sobre Modernización Fiscal. Según él, esta medida podría ser crucial para reducir la ingesta de azúcar en la población dominicana y, a largo plazo, disminuir la incidencia de enfermedades crónicas degenerativas que afectan a la sociedad.
En una declaración realizada este viernes, Sánchez Solimán argumentó que el impuesto, que se aplicará según el contenido de azúcar de las bebidas, representa una política saludable y necesaria.
“Esta iniciativa no es nueva; debemos saludarla. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha estado promoviendo leyes que adviertan a los consumidores sobre el contenido de sal, azúcar y grasas en los alimentos”, indicó.
Resaltó que ejemplos exitosos de este tipo de regulaciones se han implementado en varios países de Suramérica, donde leyes como la de Etiquetado Frontal con Advertencia Nutricional han mostrado resultados positivos.
El especialista también destacó que la causa de muerte de muchos dominicanos ha cambiado con el tiempo. Actualmente, un número significativo de defunciones se debe a enfermedades crónicas degenerativas, como la diabetes, enfermedades cardiovasculares, cerebrovasculares, crónicas respiratorias y cáncer.
Estos tipos de enfermedades, consideradas catastróficas debido a sus altos costos de tratamiento, han llevado a la OMS a señalar que el 68% de las muertes en el mundo son atribuibles a condiciones crónicas, un número que duplica las muertes por enfermedades infecciosas como el VIH/SIDA, tuberculosis y malaria.
Los datos del Ministerio de Salud Pública de República Dominicana respaldan esta tendencia. Un estudio de incidencia realizado en mayo de 2021 reveló que el 70% de la población evaluada se encontraba en sobrepeso, el 32.3% sufría de hipertensión y el 12% padecía diabetes mellitus. Estos números evidencian la creciente preocupación sobre los hábitos alimenticios y su impacto en la salud pública.
Sánchez Solimán enfatizó que la relación entre el aumento de enfermedades crónicas y los patrones de alimentación en la población es clara. “Las causas de estas enfermedades están más asociadas a los modos de vida de las personas, a sus hábitos alimenticios y a su acceso a un modelo de salud que responda a las exigencias sociales. Necesitamos un modelo efectivo basado en los pilares de la Atención Primaria en Salud (APS)”, sostuvo.
