Altos costos y otros riesgos imposibilitan que la importante premiación dominicana de Acroarte y CND sea llevada a la segunda ciudad dominicana.
Llevar los Premios Soberano a Santiago es un deseo de la Asociación de Cronistas de Arte (Acroarte) desde hace más de una década, y hay que decir que el patrocinador principal, la Cervecería Nacional Dominicana (CND), ha estado abierta a escuchar las voces que lo piden.
Pero una cosa es el deseo y otra la realidad. Presentados en el Teatro Nacional Eduardo Brito, en la capital dominicana, producir los Premios Soberano, implica una inversión millonaria de pesos y recursos humanos.
Cuando en algún momento se planteó la posibilidad de sacarlo de allí y buscar un lugar más amplio que el Teatro Nacional, se pensó en el Palacio de los Deportes Virgilio Travieso Soto. Los estudios financieros concluyeron en que no era posible. Adaptar el lugar para acoger el vistoso ceremonial de la premiación disparaba los costos de manera significativa, concluyeron los técnicos.
El deseo de llevarlos a Santiago fue en algún momento tema hasta de campaña electoral en Acroarte. Y posteriormente, para esos fines, también se hicieron los estudios correspondientes: la conclusión fue que resultaban más costosos trasladarlos a Santiago que presentarlos en el Palacio de los Deportes.
La producción de estos premios culmina con el ceremonial donde se reconoce a los artistas, pero cubre todo un trayecto de meses, lo que implica ensayos, montajes de escenografías, adaptaciones de sonido y otras actividades que deben realizarse en el lugar donde se va a celebrar.
Santiago es una ciudad pujante, pero no hay seguridad de que allí exista el talento artístico y técnicos suficiente para el montaje de los premios. Tampoco el hotelería para el hospedaje del personal y los invitados. En esas circunstancias, habría que trasladar ese personal una y otra vez desde la capital dominicana, y eso de por sí implicaría un elevado gasto, en transporte, dietas, hotelería y otros requerimientos propios de un complejo montaje como es el de los Premios Soberano.
Y si fuera en la Arena del Cibao, como era la intención del alcalde de esa ciudad Abel Martínez, se estaría ante una situación parecida a la planteada en el Palacio de los Deportes, ubicado en el Centro Olímpico Juan Pablo Duarte de Santo Domingo. De manera oficiosa se ha dicho que el traslado a Santiago implicaría un alza en los costos del montaje de entre un 20 a un 30 por ciento.
Hay otro factor que preocupa: Un alto porcentaje de los artistas, incluso de los nominados, ha sido resistente a participar en el ceremonial en el Teatro Nacional de la capital y no hay seguridad de que estos estarían dispuestos a trasladarse a Santiago, cubriendo costo de transporte y hospedaje, para participar en la ceremonia, tomando en cuenta que la producción solo cubre ese tipo de gastos a los invitados internacionales.
Aunque el alcalde Martínez promocionó la idea de que la premiación del 2019 fuera llevada a esa ciudad, su iniciativa no incluía una contrapartida que supliera ese incremento en el costo de la producción. El mismo funcionario edilicio dijo que no ofrecía dinero, sino facilidades, mucha de ellas inciertas al decir de fuentes involucradas con el financiamiento o patrocinio de la premiación.
Hay otro factor de preocupación, al margen de lo económico. Los patrocinadores, que no solo es la CND, no están seguros de que un ensayo de este tipo le funcione, y la inversión sería muy alta para una aventura.
La mayoría de empresas que patrocinan los Premios Soberano, que también apoyan otros tipos espectáculos, cuando han apoyado algún espectáculo en Santiago, no han obtenido el retorno que espera todo patrocinador. Y ese es otro obstáculo que habrá de vencer el deseo de Acroarte, que ha estado unida en ese interés, y de otros sectores, para logar que los premios Soberano sean presentados en Santiago.