No quiso decirlo, pero lo declarado por Julio Cury, lamentablemente abogado de los del número (lo que nunca fue Jottin, su padre, auténtico jurista), de que no es necesario reformar nada para que Danilo Medina sea repostulado, significa que la llamada Constitución de la República no es tal, sino un simple reglamento administrativo que bien puede acomodarse, por vía administrativa, al deleznable propósito de la reelección, por más que lo rechace un país que está harto de que todo el que llega al Palacio Nacional, endiosado, busque eternizarse en el poder.
