Pásenle revista a “lo que nunca se ha hecho” ejecutado en las últimas semanas:
1-El asesinato selectivo de Vladimir Balderas (militante del MPD y dirigente del FALPO) el pasado martes en San Francisco de Macorís, nieto de Mario Balderas, dirigente campesino y militante del MPD asesinado durante los doce años de Balaguer. Más lo de disparar contra la caminata que llevó su cadáver al cementerio municipal.
2.-El alimento del boa al “brillante economista” que maquilló técnicamente el Informe de la Comisión Presidencial sobre Punta Catalina, previa huida del caso Sun Land; ahora beneficiario de una jugosa “colaboración premiada” a raíz de su designación como Director General de las Sobrevaluadas Plantas de Carbón, aun sin concluir.
3-La singular crueldad exhibida en la reciente represión a bombazos y macanazos de la ordenada protesta de los envejecidos trabajadores cañeros que exigen el derecho a ser pensionados después de haber sido explotados y exprimidos durante décadas.
4.-La intolerancia mostrada frente los ex policías, ex militares y familiares que demandan reivindicaciones parecidas y denuncian las penurias de los de abajo y la arrogancia y opulencia de los de arriba.
5.-El silencio frente a la tecla que está tocando Tacla, denunciando la colaboración mutuamente premiada entre los ejecutivos de ODEBRECHT y el Presidente Medina, en dimensiones superiores a todas las registradas en el Continente.
6.- Las tripas de la mafia importadora dirigida desde el Palacio Nacional y el ministerio de agricultura.
7.- La autorización por el Ministerio de Medio Ambiente del corte de 39 mil árboles en la zona de Loma Miranda, mediada por el soborno de los depredadores.
9.-Más impuestos para el 911 y los hospitales colapsados.
Más corrupción y más impunidad ahora con más represión y más impuestos.
Y más represión y mayor criminalización de las protestas se relaciona con pérdida de legitimidad, con la decadencia del régimen establecido.
Debilitado, acorralado por el reclamo de sometimiento judicial a sus principales figuras, por las demandas populares y por la cadena de marchas verdes multitudinarias, sin posibilidades de satisfacer la ola de reclamos populares, el gobierno está optando por formulas violentas llamadas a debilitarlo y deteriorarlo más de lo que está.
La dictadura constitucional, corrupta y corruptora, empobrecedora por demás, está contribuyendo con la desfachatez y la represión que exhibe, a su propio desplome.
Carece ya de respaldo civil significativo, e incluso se erosiona significativamente su base de apoyo militar-policial por el impacto del empobrecimiento y los estragos de la corrupción en sus filas, lo que se profundiza al persistir tozudamente en las grotescas prácticas de corrupción que exhibe cada día y en el repudiado régimen de impunidad institucionalizada que protege a sus protagonistas y beneficiarios; sumándole ahora más represión policial desde jefaturas ladronas y criminales.
Los/as dominicanos/as de abajo y sectores medios de la sociedad, sean civiles o militares, estás hartos de tanta corrupción, abusos e injusticias.
Por eso cada vez más se refuerza la idea de que el fin de la impunidad es inseparable del fin de este régimen junto a la imperiosa necesidad de reemplazar, por la vía de una CONSTITUYENTE POPULAR Y SOBERANA, las instituciones que contrala y manipula.
Pero todavía hay que escuchar machaconamente los costosos anuncios sobre las bondades de Punta Catalina y aquellos que rompiendo records de perversidad manipulan a alumnas de primaria para ponerlas a leer con su inocencia infantil loas a Danilo Medina y agradecimientos trujillistas por “hacer lo que nunca se ha hecho”. Mano a la obra con la “revolución educativa”.
En verdad el poder en manos de seres inmorales e insensibles tiene la virtud de desconectarlos de la realidad hasta no percibir el repudio que concitan y acumulan, y así las cosas no captan la avalancha que le viene encima. Por lo que el tsunami verde lo va a coger asando batata. (VER PORTAL Z 101, 6-7-8 de agosto 2017: z101digital.com)
