SANTIAGO.- Los moradores del municipio de Villa Isabela continuaban la mañana de este martes el regreso a sus hogares, que en un 80 por ciento de fueron total o parcialmente afectadas la noche del domingo por la crecida del río Galetico, también provocando la muerte de cinco personas, cuyos restos fueron sepultados la tarde de ayer.
Mientras los habitantes de esa localidad y de sus parajes La Jaiba, Gualete, Laguna Grande y Gran Diablo despejan sus propiedades del agua, maleza y lodo, comenzó hoy a incrementarse la ayuda gubernamental, fundamentalmente a través de los Comedores Económicos del Estado y de otras instituciones.
La situación de los habitantes de las comunidades afectas era hoy bien difícil, en vista de que no disponían de agua potable ni electricidad, según se pudo observar.
El hospital del pueblo, inundado totalmente, lo que provocó el daño de medicamentos y equipos médicos, también buscaba hoy reiniciar los servicios que ofrece a los residentes allí, luego de extraer el agua a través de un sistema de bombeo.
Wascar García, director provincial de la Defensa Civil en Puerto Plata, informó esta mañana que un levantamiento preliminar establece que alrededor de 3 mil viviendas fueron afectadas por la crecida del río Galetico, lo que significa el 80 por ciento de las casas de la zona.
Más de dos mil de ellas están localizadas en el municipio de Villa Isabela, algunas de las cuales resultaron completamente dañadas, pero la mayoría de forma parcial.
Sus propietarios mantienen en las calles los ajuares que lograron salvar de la riada, mientras multiplican los esfuerzos para acondicionar sus viviendas en el menor tiempo posible.
SEPULTAN VÍCTIMAS
Cientos de personas participaron la tarde de ayer en la sepultura de Ney de Aza Santos, Reynaldo de Aza, Isaura de Aza, Pedro Antonio Batista Núñez y Delvi Núñez. Los tres primeros, miembros de una familia, murieron ahogadas dentro de su vivienda y los dos restantes cuando intentaron cruzar el río a bordo de una motocicleta.
Los fallecidos de la familia de Aza fueron sepultados en la comunidad de Gran Diablo, de donde eran nativos, en tanto que los Núñez fueron enterrados en la sección El Mamey.
