Pedro Sánchez dice recibió presiones de poderes fácticos para torpedear un entendimiento con Podemos.
Madrid, 31 oct (PL) Una gran conmoción provocaron hoy las denuncias del exlíder socialista Pedro Sánchez sobre supuestas presiones de poderes fácticos para que vedara un gobierno progresista en España y permitiera la reelección del conservador Mariano Rajoy.
En una entrevista concedida la víspera al programa Salvados, de la televisora La Sexta, el defenestrado secretario general del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) acusó directamente al diario El País y a empresarios de torpedear un entendimiento con Podemos.
Sánchez expresó que desde el poderoso grupo de comunicación Prisa, dueño del citado periódico, le advirtieron que no le concederían su respaldo editorial si bloqueaba un acuerdo del PSOE para dejar gobernar a Rajoy, del derechista Partido Popular (PP).
Respecto a esas revelaciones, el líder de la agrupación antiausteridad Podemos, Pablo Iglesias, lamentó hoy que el otrora dirigente de la centenaria organización reaccionara demasiado tarde.
'Si hubiera sido tan valiente antes, quizás podríamos estar gobernando', reprochó Iglesias en alusión al silencio de Sánchez durante el último año, en el que su formación intentó en vano llegar a un acuerdo con socialistas para gobernar en coalición.
Tras mostrarse impresionado por las denuncias, porque 'dijo muchas verdades', el secretario general de la tercera fuerza política en España afirmó que 'tenía que haberlas asumido en otro momento', aunque le dio las gracias por las comprometedoras declaraciones.
Opinó que las palabras del destituido líder socialdemócrata confirman que 'no le iban a dejar (formar una alianza con la izquierda) los poderes oligárquicos' ni tampoco en su propio partido.
Se refirió a que Sánchez reconoció anoche que el Comité Federal -máximo órgano de dirección del PSOE- le colocó en una 'situación imposible', al no permitirle buscar un pacto con Podemos.
Sánchez, de 44 años, fue forzado a renunciar a principios de mes por una rebelión de miembros de la dirección de su partido en desacuerdo con el veto que el líder mantuvo a cualquier ejecutivo encabezado por el PP.
Iglesias valoró, además, la honestidad del depuesto dirigente al admitir que se equivocó en su aproximación a la agrupación antiausteridad.
'Taché a Podemos de populista, allí me equivoqué. No supe entender el movimiento que había detrás de esa formación, consideró el también exdiputado, quien exhortó al PSOE a 'mirar de tú a tú y trabajar codo a codo con Podemos'.
En cuanto al control ejercido por los poderes financieros sobre los medios de comunicación para presionar hacia la abstención del PSOE en favor de Rajoy, lo que finalmente se consumó, Iglesias señaló que cuando Podemos lo dice es acusado de atacar la libertad de expresión.
Pero que lo diga Pedro Sánchez, un ex secretario general del PSOE, es tremendo y tiene muchas implicaciones, sentenció el líder de la llamada formación morada.
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