Se ha elevado a 350 el número de personas fallecidas por el terremoto ocurrido el sábado en Ecuador, ha informado el ministro de Seguridad este lunes, cuando aun brigadas tratan dar con el paradero de otras personas que se suponen están debajo de los escombros.
El ambiente reinante es dantesco en las zonas afectadas, donde hay personas que desesperadamente tratan de dar con el paradero de sus familiares debajo de los desplomados edificios y viviendas, especialmente en Pedernales, una ciuidad costera muy afectada por el sismo. El terremoto, que causó múltiples estragos en el país y fue percibido también en Colombia y Perú fue de magnitud 7,8.
El foco del sismo se ubicó en una zona entre las ciudades de Pedernales y Cojimíes, en la provincia de Manabí, a 20 kilómetros de profundidad.
Hasta el domingo en la noche se reportaron 95 personas albergadas, 370 edificaciones destruidas, 151 edificaciones afectadas, al igual que 37 escuelas. Hasta ayer hubo 214 réplicas, informa el diario El Comercio.
En Manabí nueve vías están cerradas; de estas dos colapsaron, informa el diario, que menciona a Portoviejo-Crucita-Puente Mejía y Portoviejo-Puente Papagayo. En la provincia de Bolívar, la vía Chillanes-Bucay está totalmente inhabilitada al tránsito.
