El ex presidente de la Republica, Leonel Fernández, defendió la política migratoria del gobierno dominicano, saliéndole al paso a la campaña de descrédito, que afirma se basa en falacias.
En su escrito Observatorio Global, que publica cada dos semanas en el Listín Diario y en Vanguardia del Pueblo Digital el también presidente del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) rechaza los alegatos de que al aplicarse el plan de regulación de migrantes se haya producido un despojo de la nacionalidad dominicana.
El Presidente del PLD negó que haya ciudadanos apátridas en el país, practica racista, discriminación genocidio civil, como se ha dicho internamente y en el exterior: “No es cierto que como resultado de la aplicación del referido plan, haya habido un despojo masivo de la nacionalidad dominicana; que haya ciudadanos apátridas en nuestro territorio; que haya habido prácticas racistas y discriminatorias; una limpieza étnica o un genocidio civil; o, que hayamos instalado un sistema de apartheid o de estímulo a la negrofobia” escribe Leonel Fernández
El artículo aparece en la página dos del matutino Listín Diario, el cual dio al mismo importancia de noticia principal al colocar una reseña en portada con el título:” Leonel: reforma migratoria derrumba mito de apatridia” y el sub título “Ex presidente dice campaña de descrédito contra el país se fundamenta en Falacias”
En su artículo el ex mandatario también objetó declaraciones que atribuyen al país prácticas de deportaciones masivas y la difusión de declaraciones de que el Plan de Regularización fue diseñado para que fracasara.
Al refutar las acusaciones sobre discriminación y racismo Leonel Fernández cita la cantidad de inscritos para regularizarse, un total de 288 mil personas, lo que considera “la prueba más evidente de que hubo una respuesta masiva, y un procedimiento adecuado, para que, por vez primera en la Republica Dominicana, un número importante de personas indocumentadas, pudiesen regularizar su status migratorio”
En definitiva, denuncia el ex presidente dominicano se está ante un nuevo intento por degradar al país “y desprestigiarnos ante la comunidad internacional, que como pueblo generoso y solidario, no merecemos”, concluye
