Mujeres embarazadas, en especial las adolescentes, son educadas y orientadas física y emocionalmente para que tengan un parto saludable sin necesidad de cesárea y con el objetivo de disminuir el riesgo de muerte materno-infantil.
Mediante el programa “Por un comienzo positivo”, que implementa el Despacho de la Primera Dama, Cándida Montilla de Medina, desde junio de 2013, las mujeres reciben asistencia y orientación los lunes, martes y miércoles en la Maternidad Nuestra Señora de la Altagracia y en el Hospital de la Mujer del Instituto Dominicano de Seguros Sociales (IDSS), en la capital.
Temas como la prevención de muerte materna, las enfermedades de transmisión sexual y de manera especial, la promoción del parto sin cesárea, son tratados con las adolescnetes y embarazadas que visitan esos centros hospitalarios.
Menos cesáreas
La doctora Mary Concepción, psicóloga perinatal, dirige este programa de educación y prevención que reduce las muertes materno-infantiles y disminuye las cesáreas en el país.
Explicó que las acciones que desarrollan forman parte de la atención primaria que abandera el presidente Danilo Medina para que las personas vulnerables y de escasos recursos, en este caso las embarazadas, reciban asistencia médica.
“En la medida en que disminuyen los riesgos de la madre a través de la educación, habrá más niños sanos y madres empoderadas en su proyecto de familia”, sostuvo la especialista.
Parto humanizado
La profesional de la salud indicó que en el programa “Por un comienzo positivo” ofrecen asistencia para que las embarazadas tengan un parto humanizado y explicó que el equipo de especialistas acompaña a las futuras madres en el momento del parto, dándoles aliento y técnicas de respiración para hacer más fácil el alumbramiento del bebé.
Además, se les enseñan ejercicios físicos y de relajamiento para inducir el parto natural, sin traumas, y disminuir los alumbramientos con cesáreas.
Lactancia materna, alimentación e higiene
Con este programa, el Despacho de la Primera Dama lleva asistencia de atención primaria a cientos de embarazadas, promueve además la lactancia materna y obsequia vitaminas a las futuras madres adolescentes.
Asimismo, reciben instrucciones sobre la forma correcta de alimentarse y los cuidados de higiene que deben adoptar para el infante.
