<b>El secretario general de la Alianza del Atlántico Norte (OTAN),
el danés Anders Fogh Rasmussen, anunció “medidas adicionales para reforzar la defensa
colectiva” de la Unión Europea ante las amenazas que representa Rusia para esa
región.</b>
Entre las medidas se incluyen “planes de defensa
actualizados y más desarrollados, ejercicios reforzados y despliegues
apropiados” en la zona de tensión, luego que Rusia se anexara a Crimea,
territorio de Ucrania que ha planteado su acercamiento hacia Europa.
El anuncio del jefa de la OTAN fue hecho inmediatamente después
que el presidente de Estados Unidos sugiriera a los países europeos que
revisaran su defensa ante la amenaza de Moscú y los instara a invertir más en
la misma.
Rusia ha estado movilizando sus tropas hacia el Mar Negro,
en la medida que ha ido tomando el control de Ucrania, donde fue depuesto un
gobierno proruso por uno proeuropeo. Desde entonces, Crimea, península ucraniana,
inició un proceso separatista que terminó anexándose a Rusia.
Luego de anunciar los planes de reforzamiento de la defensa
de Europa, Rasmussen aludió a los planes
de cooperación militar en la zona más amenazada por el desafío ruso —Polonia,
los países bálticos y Rumanía, básicamente— y a la posibilidad de realizar
ejercicios militares más allá de los ya previstos.
La OTAN envió hace un par de semanas dos aviones de
vigilancia AWACS a las fronteras polaca y rumana con Ucrania. Y fuera del marco
de la organización militar, EE UU reforzó su colaboración con Varsovia con el
envío de 12 aviones de combate F-16.
El diario elpais.com refiere que descartada la ofensiva
militar, la forma que tiene la OTAN de mostrar su fuerza (nunca en Ucrania, que
no forma parte de la organización, pero sí en los países cercanos) consiste en
realizar esos ejercicios, una suerte de ensayos preparatorios para situaciones
de emergencia. Se trata de acciones de disuasión: la organización los programa
periódicamente, pero intensificarlos ahora en el Este responde a la creciente
preocupación por la amenaza rusa.
