SANTIAGO.- Los residentes en la parte céntrica de esta ciudad reciben
agua potable con color, situación que la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santiago
(Coraasan) atribuye a la liberación del líquido desde el contra embalse de
López, que arrastra materias orgánicas acumuladas en su lecho.
No obstante, Darío Fernández, director de relaciones públicas de esa
institución, aseguró que el producto puede ser consumido por las personas, en
vista de que previamente es tratado de manera adecuada en las plantas
potabilizadoras de la empresa.
Explicó que desde hace algunos días el contra embalse de López, de
donde se nutren de agua las plantas ubicadas en el sector Nibaje, que
diariamente procesan 35 millones de galones de agua, es desfogada y las mismas
llegan al río Yaque del Norte acompañadas de materias orgánicas provocadas por
troncos y ramas de árboles que terminan en su lecho.
En dichas plantas se procesa el 15 por ciento del líquido que oferta
Coraasan a sus clientes, fundamentalmente ubicados en el centro de la ciudad.
El restante 85 por ciento es tratado en la planta localizada en la comunidad La Noriega, que se surte de
la presa de Bao.
Fernández insistió en que el líquido, aunque presente color, es potable
y puede consumirse, en vista de que previamente se le trata de manera adecuada
con los productos químicos que la hacen apta.
Precisó que en los próximos días el agua potable volverá a ser
incoloro, cuando concluya la liberación del líquido que se realiza desde el
contra embalse de López.
La zona donde mayormente se recibe agua con color está enmarcada entre
los barrios La Joya,
Baracoa, Pueblo Nuevo, Nibaje, Los Pepines, La Zurza y el casco urbano de la ciudad.