<b>SANTO DOMINGO.- Decenas de empleados
de la Licorera La Altagracia, la única industria instalada en la provincia
Bahoruco, reclamaron su derecho al trabajo durante una vigilia pacífica
realizada este martes frente al Tribunal
Contencioso Administrativo. Aunque no hubo incidentes, el organismo estuvo fuertemente
custodiado por un contingente de militares antimotines adscritos al
destacamento Duarte.</b>
La manifestación se
desarrolló mientras se conocía una solicitud de adopción de medidas cautelares
incoadas por la Asociación de Industrias de la República Dominicana (AIRD) a
fin de que se declare la suspensión de varias resoluciones aprobadas por el
Consejo de Coordinación de la Zona Especial de Desarrollo Fronterizo para la
instalación de diversas empresas. La audiencia, presidida por la magistrada Delfina
Amparo De León, fue reenviada para el 6 de febrero próximo, a pedido
de los abogados de las firmas afectadas.
Marichal Romero, quien
habló a nombre de los obreros, dijo que junto a sus familiares viven
angustiados y con temor de perder sus empleos y el sustento y supervivencia
porque la AIRD se opone a las operaciones de la licorera, pese a que esta
empresa fue autorizada y ratificada por los organismos competentes tras cumplir
con todos los requisitos legales.
Afirmó que como dominicanos
ellos también tienen derecho al trabajo honrado y a gozar de los beneficios de
la Seguridad Social (salud, riesgos laborales y seguro de vejez, discapacidad y
sobrevivencia).
La Licorera La Altagracia se dedica a la
producción, comercialización, importación y exportación de rones, licores y
otras bebidas alcohólicas. En la actualidad fabrica nueve tipos de rones
agrícolas, los que se exportan fuera del territorio dominicano y cuyos
beneficios contribuyen al desarrollo, crecimiento, bienestar y progreso del
denominado sur profundo.
Según Romero, si se suspenden
las autorizaciones otorgadas a la licorera se perderá la única fuente de
empleos de la zona y se reducirá a su mínima expresión la actividad productiva
de una provincia que, como Bahoruco, ocupa uno de los índices de menor
desarrollo del país.
La AIRD alega que las
operaciones de la Licorera La Altagracia, así como de las empresas Vaperdy,
Maiberil International, Yoseplastic, Saerat Investment, R. V. Steel, Puerto
Copello y Hormigones Fronterizos provocarán una distorsión en el mercado
nacional y elevó un recurso contencioso administrativo para que las autoridades
revoquen los permisos.
Esas empresas fueron
autorizadas a instalarse y operar al amparo de la Ley 28-01 por el Consejo de
coordinación Especial de Desarrollo Fronterizo, en la asamblea del 26 de julio
pasado. Las licencias se confirmaron y ratificaron en la asamblea general
ordinaria del 26 de septiembre último, reconociéndose que contribuirían de
manera directa y significativa al desarrollo y progreso de la región de mayor
marginalidad, pobreza, miseria y abandono de toda la geografía nacional.///