La decisión fue anunciada este jueves por el procurador Francisco Domínguez Brito, quien envió una comunicación al director de Prisiones, mayor general Tomás Holguín la Paz.
El magistrado impartió instrucciones para que ningún recluso disfrute de esas comodidades, así como del uso de parábolas, laptops, entre otros.
Indica que quienes gozan de esos privilegios son los reclusos que precisamente cumplen condenas por graves delitos, a los cuales se les ha permitido ser poseedores de grandes fortunas de dinero, con las que acostumbran a comprar, no sólo impunidad, sino también ciertos beneficios que el sistema no puede seguir permitiendo.
“Los narcotraficantes por ejemplo, tienen muchos aires acondicionados y eso para nosotros es intolerable", afirmó.