PUNTA CANA, Higuey.- El
Ministro de Economía, Planificación y Desarrollo considera urgente que la
municipalidad se haga cargo de la tarea pendiente de adecuar y reglamentar su
propia Ley 176-07, al pronunciar un discurso ante la apertura  del IV Congreso de la Asociación
 Dominicana de Municipios reunido aquí. 
El funcionario también
se refirió a la necesidad de un cambio o redefinición de las funciones de la Liga Municipal
Dominicana (LMD) para que opere como un ente que contribuya aún más con las
alcaldías y los munícipes, informó la
 Unidad de Comunicaciones del Ministerio de Economía.
El Congreso, inaugurado
la noche del jueves en las instalaciones de Hard Rock Hotel, en Bávaro, en cuyo
salón estuvieron los representantes de los ayuntamientos municipales,
encabezados por el presidente de la
 Asociación, 
Andrés Julio Ricardo.
Montas explicó que la
urgencia de adecuar y reglamentar la ley de municipios y del Distrito Nacional
está en que se avizora el traspaso a las alcaldías de recursos y funciones
tributarias y a la creación del Fondo de Cohesión Territorial, como a la
implementación también de políticas que trascienden los límites geográficos
municipales.
El funcionario
compartió con los representantes municipales ideas sobre la Ley de Estrategia Nacional
de Desarrollo que está en vigor desde su promulgación este año y la cual
también consigna la reforma institucional de los municipios.
De acuerdo con la Estrategia, el 100% de los
ayuntamientos deberá diseñar y ejecutar planes de desarrollo y presupuestos
participativos con un horizonte que no supere los próximos 5 años, acompañado
del fortalecimiento de controles internos, supervisión, seguimiento y rendición
de cuentas.
Montás dijo que en el
horizonte también asoma la aplicación en todo el ámbito municipal público de la Carrera Administrativa, sin
la que consideró quimérico plantearse el aumento de las capacidades técnicas,
gerenciales y de planificación de los ayuntamientos, necesarias para fortalecer
la función de recaudación con personal técnico calificado y estable.
Consideró que otro de
los retos que el Gobierno Central y el Local deberían comenzar a profundizar es
el rol que en el futuro deberá jugar la Liga Municipal Dominicana en la nueva etapa
de la municipalidad.
“Debería dialogarse
sobre la conveniencia de que la
 LMD, además de tener funciones de asesoría, sea
concebida como instancia con funciones de planificación y supervisión
mancomunal, seguimiento de planes municipales, capacitación de personal a nivel
técnico y administrativo e instancia de enlace entre las tareas municipales y
el Plan Nacional Plurianual del Sector Público”, propuso el ministro.
En otras palabras, dijo
que la Liga
podrá ser responsable de articular los informes anuales de mediano plazo y de
término que deben preparar las alcaldías según sus estrategias y planes
municipales relacionados con la
 Ley de Estrategia 2030 y el Plan Nacional Plurianual del
Sector Público.
  En la introducción de su discurso, Montás hizo un
recuento de cómo ha venido cambiando la concepción que limitaba lo rural a
“campesino” contrapuesta a lo urbano como lo “civilizado”, consumidores de todo
cuanto los otros producían.
“Nada sería más falso
que eso el día de hoy. El ámbito rural es sobre todo una demarcación
territorial en la cual cabe desde la apropiación directa de los recursos
naturales allí presentes, hasta los procesos productivos complejos, incluso de
alta tecnología, que transforman esos recursos en productos elaborados con alto
valor agregado”, redefinió, a partir de una concepción de Echeverri y Rivero.
Agregó que ese proceso
de articular políticas públicas con el concurso del poder municipal requiere de
una concepción nueva de la planificación, para desarrollar por ejemplo
asentamientos rurales concentrados, hacer más eficiente la provisión y el
acceso a los servicios básicos y promover ciudades intermedias o pequeñas de
carácter estratégico.
Montás señaló que la
importancia de la dimensión territorial para la nueva ruralidad y el ejercicio
participativo del gobierno local, la
 Estrategia incorpora el objetivo de cohesión territorial
integrado al diseña y la gestión de las políticas públicas.
 En su discurso, el funcionario también se
refirió a la importancia que la
 Ley de Estrategia confiere a la inequidad social o
faltas de oportunidades que en la
 República
 Dominicana tienen una cara rural, donde la pobreza era de
48.2% de la población en octubre de 2011, mientras en la urbana era de 39.3%. 
“Y si se mira la población indigente la
situación es mucho más desigual, ya que en la zona urbana 8.2% de la población
está en condición de indigencia, mientras en la zona rural esa proporción se
eleva al 15.2% de su población. 
El ministro Montás también citó que en la zona
urbana el 6.6% de la población mayor de 15 años es analfabeta; el 16.8% en la
rural y las grandes diferencias se dan en las tasas de matriculación neta en la
educación secundaria y universitaria. 
En efecto, mientras 65 de cada 100 jóvenes de 14 a 17 años asiste a la
educación media en la zona urbana, en la zona rural solo pueden hacerlo 54, y
mientras 28 de cada 100 jóvenes de 18
 a 24 años en la zona urbana puede asistir a la
universidad, en la zona rural solo pueden hacerlo 15.  
Finalizó señalando que la situación de
inequidad se manifiesta no solo en materia de acceso a la educación, sino
también en acceso a servicios de salud, servicios de agua potable,
electricidad, transporte y condiciones de la vivienda.
 
	    	