SANTO DOMINGO.-Un grupo de catedráticos universitarios demandaron mediante carta dirigida al presidente del Senado de la República, pedir perdón al país por la nota de desagravio al presidente de los Estados Unidos Barack Obama que emitieron por una supuesta difamación e injuria del candidato presidencial perredeísta Hipólito Mejía.
Los catedráticos, 19 en total; dicen en su documento que sienten vergüenza pública por ante el ridículo que significan los senadores, a los que cuestionaron porque que solo se prestan para cultivar el chismes como acción política, con la que evidencian su incapacidad para contribuir a propiciar con su esfuerzo los cambios positivos que la sociedad demanda.
El documento firmado por los catedráticos Franklin García Fermín, ex rector de la UASD; Santo Inocencio Mercedes, José A. Cancel, Mariana Morales, Juan F. Medina, Ydelsi Cruz, José Eligio Peralta, Nelson Larcier López, Augusto Bravo, Rafael Méndez, así como Yuri Cosme Lewis, Santo López, Filiberto Cruz, Geraldino Caminero, Noel de la Rosa, Ángel Sosa, Henry Blanco, Ana Candelier y Lourdes Herrera, reclamaron de los senadores, pedir perdón también por no haber cumplido con las funciones para los que fueron electos.
Además por que no han fiscalizado los recursos del Estado en esta campaña electoral, por el no cumplimiento de la Ley que asigna el 4%del Producto Interno Bruto a la educación, por el vulgar reparto cada mes del dinero del erario público en el llamado “barrilito”, el que es usado para el provecho personal de cada senador.
Agregan que deben pedir perdón a los dominicanos por no exigir una explicación de los actos de corrupción de los fondos públicos por uno de sus miembros (Félix Bautista), por permanecer ajenos al auge del narcotráfico, el crimen, la violencia, los femenicidios y los viajes ilegales.
Los catedráticos demandan perdón porque mientras el presidente de la República habla por el mundo de la crisis alimentaria, aquí en el país, quiebran los productores nacionales, por no dotar al país de una Ley de partidos políticos, porque mientras hay niños que reciben el pan de la enseñanza debajo de los árboles, los senadores se embolsan los recursos del Estado en el “barrilito”.
Pedir perdón a los infelices dominicanos que llegan a los hospitales y son atendidos en el suelo por falta de una cama, por el hombre, la miseria, la inseguridad, el atraso, la pobreza, la ignorancia, las carencias que afrontan cada día el pueblo dominicano ante la indolencia y la desidia del honorable Senado de la República.
Advirtieron los profesores universitarios, que si los senadores no piden perdón al país, el pueblo dominicano les pasará factura el 20 de mayo durante las votaciones en las elecciones pautadas para ese día.