Jueves, 12 de enero de 2012
En los últimos días del año
pasado, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal)
predijo que la creciente incertidumbre financiera mundial tendrá
repercusiones negativas sobre la región, que crecerá menos que en años
anteriores. Pero en medio de ese panorama poco alentador, un país
resalta por sus buenos pronósticos: Haití.
Según las estimaciones preliminares de la Cepal,
una entidad que está adscrita al sistema de Naciones Unidas, Haití será
el país de América Latina y el Caribe con la mayor tasa de crecimiento
en 2012 (8,0%), una cifra que es más del doble del promedio regional
(3,7%) y muy por encima del segundo país en la lista (Panamá, con 6,5%).
¿A qué se debe que el país más pobre y frágil
del continente, que todavía está luchando para recuperarse del
devastador terremoto de hace exactamente dos años y tiene serios
problemas sanitarios y de infraestructura, sobresalga repentinamente por
su rendimiento económico?
Reactivación
BBC Mundo consultó con Sandra Manuelito,
funcionaria de asuntos económicos de la Cepal, quien argumentó que la
tasa de crecimiento es el pronóstico oficial y considera
fundamentalmente tres supuestos.
El primero es que se espera que este año se
normalice la gestión pública después de una etapa que la Cepal calificó
como "una larga transición de incertidumbres" que generaron que Haití
"apenas" creciera 4,5% en 2011, en vez del pronóstico original de 8%.
Como explica Manuelito, la gestión pública "se
vio parcialmente frenada durante 2011 debido a las elecciones
presidenciales y al proceso de constitución y toma de posesión del nuevo
gobierno" de Michel Martelly.
El segundo factor es que en 2012 podrían
aumentar los ingresos derivados de la inversión extranjera directa en el
país, que ha sido uno de los proyectos bandera del presidente Martelly y
que según la Cepal "contribuye a forjar cierto optimismo en el proceso
de recuperación".
En particular, esto se refiere a proyectos en
los sectores de maquiladoras (un parque industrial por cerca de US$50
millones) y de infraestructura turística hotelera (cerca de US$90
millones).
Ayuda externa
El último elemento es que se espera que se
reactive el ritmo de desembolso del dinero proveniente de los donantes,
un tema que es particularmente sensible para Haití.
En marzo de 2010, decenas de países y
organizaciones prometieron donar casi US$10.000 millones para la
reconstrucción, de los cuales US$5.000 millones debían entregarse en los
siguientes 18 meses.
No obstante, según informó en noviembre de 2011
la misión de las Naciones Unidas para la estabilización de Haití
(Minustah), sólo se había desembolsado alrededor del 40% de la ayuda
prometida para 2010-2011.
Lo más grave del asunto es que ni siquiera el
gobierno tiene certeza del destino de esa ayuda. El mismo presidente
Martelly reconoció en una visita a Madrid en julio de 2011 que "se han
inyectado US$4.000 millones y hoy tengo problemas para identificar algo
que se haya hecho con ese dinero".
Robert Fatton, un profesor de origen haitiano de
la Universidad de Virginia, en Estados Unidos, señala que "tiene que
ponerse en perspectiva que ciertamente no es un indicio de que Haití
está escapando de la pobreza ni en camino a un 'mini-boom’".
"Las tasas de crecimiento reflejan el hecho de
que Haití se estaba desmoronando después del sismo", explica Fatton.
"Así que cuando hablamos de crecimiento, sí, puede ser sorprendente,
pero también refleja que habíamos caído tanto que era difícil pensar que
pudiéramos caer en un hueco aún más profundo".
Campamentos y recuperación
Con motivo del segundo aniversario
del sismo, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), una
de las entidades que tiene una misión en Haití, dio a conocer cifras
sobre la recuperación del país.
La cifra de personas en
campamentos se redujo en un 66%, pasando de un máximo de 1,5 millones en
julio de 2010 a 515.819 residentes.Han sido construidos más de 100.000 refugios transitorios en los que se alojan unas 420.000 personas.El gobierno presentó el proyecto 16/6, que concede subsidios de alquiler para desalojar los campamentos.Bajo supervisión de la OIM, 200
haitianos se encargan de cartografiar la distribución de viviendas en
las zonas afectadas, una labor calificada de "fundamental en el proceso
de reconstrucción".
Esto va de la mano de un segundo punt la
dificultad para comparar proyecciones económicas en países con
realidades completamente distintas.
Según le contó a BBC Mundo Alex Dupuy, autor de
un libro sobre historia económica de Haití desde 1700 y profesor de la
Universidad Wesleyan, en el estado estadounidense de Connecticut, "dada
la situación de la economía después del terremoto, cualquier crecimiento
será significativo e incluso puede ser mayor que el de otras economías
de la región, pero eso es porque la base en Haití es mucho más baja
comparativamente".
"Por ello, me parece que todo este tema de las
tasas de crecimiento carece de sentido. Incluso si países como México,
Colombia o Perú tienen menores tasas de crecimiento, parten de un punto
más alto en su habilidad para generar desarollo económico sostenible",
añade.
La Cepal es consciente de ello y Manuelito
explica que si bien "mayor crecimiento implica un aumento de la riqueza
del país y del bienestar de la población, el bienestar depende del punto
del cual se crece".
Por ello, la funcionaria resalta que es
importante poner el foco en el desarrollo económico y en políticas que
permitan convertir ese crecimiento económico en un motor para cerrar
"las brechas estructurales productivas y sociales".
<a href="http://www.bbc.co.uk/mundo/noticias/2011/02/110207_video_haiti_reciclaje_med.shtml" class="page"><span class="link-title">Vea también este video: Haití reconstruye su futuro con escombros</span></a>