Bagdad, 3 jul (PL) Al menos ocho soldados estadounidenses murieron entre el domingo y el lunes últimos para un promedio de 2,6 decesos por día, según informaciones confirmadas hoy por fuentes oficiales. Un soldado pereció la víspera a consecuencia del estallido de una bomba en la provincia de Salahedin, al norte de esta capital, informó el mando castrense en un comunicado.
El incidente ocurrió cuando el vehículo en que viajaban varios efectivos chocó con un artefacto explosivo, otros dos militares sufrieron lesiones, indica la nota.
Con este deceso las víctimas mortales de las tropas de Estados Unidos en Iraq aumentaron a ocho en julio, al sumársele siete el domingo, entre ellos dos miembros de la Infantería de Marina que perecieron en un accidente en Al Anbar.
Los meses de abril, mayo y junio se convirtieron en los más letales para esas fuerzas desde el comienzo de la invasión y posterior ocupación en marzo de 2003, con 355 muertos, según cifras del Pentágono.
Mientras, un helicóptero estadounidense del tipo OH-58D Kiowa Attack fue derribado por la resistencia en el sur de Bagdad y sus dos tripulantes sufrieron heridas menores, informó el mando norteamericano.
La nave fue impactada la víspera desde tierra y los dos pilotos del cuerpo de expedición Marne pudieron ser rescatados por otra unidad aérea, señaló la fuente.
En lo que va de 2007 Estados Unidos perdió 11 helicópteros y 30 hombres a causa de los ataques de la resistencia contra esas aeronaves, dos de las cuales pertenecían a fuerzas contratadas por empresas privadas estadounidenses.
Entretanto, un atentado con coche bomba contra una patrulla de policías causó hoy dos muertos y una decena de heridos en la norteña ciudad iraquí de Kirkuk, informaron fuentes oficiales.
La detonación del vehículo también dañó carros del cuerpo armado y edificaciones cercanas.
Por otra parte un informe de la organización Human Rights Watch denunció que en el norte iraquí las fuerzas de seguridad kurdas aplican métodos de tortura contra los prisioneros y los mantienen encarcelados sin presentar cargos formales contra ellos.
El texto reveló que las víctimas son detenidos capturados por las tropas estadounidenses e iraquíes durante las incursiones en las ciudades y regiones del país.
